viernes
7 y 9
7 y 9
El expresidente de Perú, Alejandro Toledo, pasó de ser la promesa de un “cholo” del común que puso fin al gobierno dictatorial de Alberto Fujimori en 2001, a un exmandatario fugado de la justicia que este martes fue detenido en Estados Unidos por un mandato de extradición.
El Ministerio Público (Fiscalía) de Perú anunció en la tarde que, “ a través de la Unidad de Cooperación Judicial Internacional”, Toledo fue arrestado en Estados Unidos, donde residía desde 2017 para evadir una orden de detención preventiva en medio de la investigación por el caso Odebrecht.
Toledo, conocido como “el cholo” desde su campaña a la presidencia en 2000 en la cual reivindicó sus rasgos faciales indígenas, está acusado de haber recibido 20 millones de dólares de la constructora brasileña Odebrecht como un soborno durante su presidencia para que la compañía obtuviera la licitación de las obras Interoceánica Sur 2 y 3, el cual habría sido pagado a partir de 2006.
La detención de Toledo en Estados Unidos no significa que se haya concretado su extradición hacia Perú. Como explicó ayer a la agencia Efe el ministro de justicia de ese país, Vicente Zeballos, el proceso podría tardar alrededor de un año. El próximo viernes estaría programada otra audiencia en la que se define si Toledo afrontará su defensa en libertad bajo fianza o en una prisión extranjera.
Pieza en el mapa Odebrecht
El primer vínculo entre Toledo y el escándalo de corrupción que implica a cuatro expresidentes de Perú (ver Protagonistas), tiene su origen en 2013. Desde entonces comenzó una investigación contra el exmandatario por las adquisiciones en 2012 por más de 5 millones de dólares de su suegra, Eva Fernenbug a través de la empresa Ecoteva, fundada en Costa Rica.
En su momento, Toledo aludió las millonarias compras a una indemnización que Fernenbug habría recibido por ser una víctima del Holocausto. Pero el avance de la investigación desmintió esa afirmación y vinculó esos gastos con los presuntos sobornos dados por Odebrecht al expresidente.
La clave en esta relación la dio el empresario y exmano derecha de Toledo, Josef Maiman, quien este año firmó un acuerdo de colaboración con la Fiscalía especial para el caso Lava Jato (que investiga el caso Odebrecht). Maiman aseguró que él recibió los dineros pagados por Odebrecht y tramitó su entrega a la empresa Ecoteva.
La detención de Toledo es, para la exministra de justicia peruana Marisol Pérez Tello, “una éxito de los acuerdos de colaboración eficaz logrados por la fiscalía especial, pues Maiman fue clave para corroborar que el dinero recibido por Toledo era ilícito”.
Para Mauricio Jaramillo Jassir, profesor de relaciones internacionales de la U. del Rosario, la captura de Toledo es una muestra más de la importancia que el sistema judicial da a los casos de corrupción en Perú, uno de los países en los que el caso Odebrecht ha mostrado más avances en la región