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¿Es muy pronto para relajar bioseguridad en EE. UU.?

Las autoridades sanitarias de ese país flexibilizaron las medidas para las personas que ya se vacunaron.

  • En EE. UU. las personas que ya recibieron una vacunación completa tienen el “permiso” de las autoridades sanitarias para dejar de usar el tapabocas. FOTO AFP
    En EE. UU. las personas que ya recibieron una vacunación completa tienen el “permiso” de las autoridades sanitarias para dejar de usar el tapabocas. FOTO AFP
19 de mayo de 2021
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La vacunación contra el coronavirus en EE. UU. ha sido una de las más rápidas del mundo, pues ese es el país que más dosis ha aplicado. Según datos de la Universidad Johns Hopkins, hasta el pasado 17 de mayo se usaron más de 273 millones de dosis y unas 123 millones de personas ya habían recibido la inmunización completa. Estas cifras han estado acompañadas por algunos anuncios que parecen ser una ventana a lo que pasará en materia de salud pública en los próximos meses.

Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés) actualizaron sus recomendaciones e hicieron varias modificaciones respecto a los protocolos de bioseguridad que deben seguir las personas que ya han completado su esquema de vacunación contra la covid-19.

Aunque anteriormente ya se había aconsejado que estos individuos podían estar sin tapabocas al aire libre y cuando se encontraran con otros vacunados en espacios cerrados la guía compartida por los CDC flexibilizó aún más sus directrices. Allí se advierte que pueden volver a hacer “sus actividades sin usar un tapabocas o sin mantenerse a una distancia de seis pies (1,8 metros), excepto cuando lo exijan las leyes, reglas y regulaciones federales, estatales, locales, tribales o territoriales”.

“En cambio, continuamos recomendando el porte de tapabocas en actividades y en lugares muy frecuentados, como los estadios llenos o los conciertos”, indicó la directora de los CDC, Rochelle Walensky.

Vale decir que, según datos compartidos por la Asociación Americana de Personas Jubiladas (conocida en inglés como AARP), al menos 22 estados aún tienen medidas vigentes relacionadas con el uso de tapabocas. Sin embargo, la mayoría de ellos ajustará estas directrices a las recomendaciones impartidas por los CDC. Es decir, en la práctica, un tercio de la población estadounidense se acerca a un escenario de pospandemia.

Los expertos, entretanto, han tenido opiniones encontradas frente a este tema. “Los que ya están totalmente vacunados pueden llevar un tapabocas en señal de solidaridad o de forma simbólica, pero no beneficia a nadie más”, le dijo Vinay Prasad, epidemiólogo de la Universidad de California en San Francisco, a la AFP.

Por su parte, el exdirector del Instituto Nacional de Salud de Colombia (INS), Fernando De la Hoz, señaló que la población que se ha logrado vacunar hasta el momento en EE. UU. aún no es suficiente para “detener el virus”. Pero sostuvo que en ese país sí hay una “alta protección contra el desarrollo severo de la enfermedad, porque han estado vacunando a las personas más frágiles, con mayores factores de riesgo. Contra lo que yo diría que están protegidos es contra el riesgo de colapsos hospitalarios y contra la posibilidad de tener que hacer cuarentenas masivas”, dijo.

“No hay mucha evidencia sobre qué pasa cuando (las personas vacunadas) se infectan y qué tanta capacidad tienen de diseminar el virus. Pero hay que asumir, esa es mi posición, que sí tienen alguna posibilidad de contagiar a otros”, añadió.

Según él, los datos que permitieron tomar estas decisiones son preliminares. “No dudo que estas recomendaciones puedan cambiar en el futuro, a medida que se conozca mejor cómo se desarrolla la vacunación en una población masiva”, puntualizó.

Seroprevalencia en EE. UU.

Según información de los CDC, se estima que alrededor de 114,6 millones de personas ya se infectaron con el coronavirus en EE. UU. De esta población, también se supone que hubo cerca de 97,1 millones de personas sintomáticas.

De acuerdo con Carlos Agudelo, epidemiólogo de la Clínica Universitaria Bolivariana, aunque estas cifras de seroprevalencia sí implican que puede llegarse con más rapidez a la anhelada inmunidad colectiva, hay que ver los datos con contrastes. Y señaló que esta meta hace referencia a “la cantidad de personas que está protegida de una infección por medio de una vacuna o de una infección previa. La inmunidad (para personas contagiadas) se conserva durante unos 8 meses en el 80 % de los casos, pero no sabemos quién la adquiere y quién no”, subrayó.

También señaló que, para él, las decisiones de EE. UU. son arriesgadas y puso como ejemplo el caso de Manaos, Brasil, donde el coronavirus tuvo un fuerte impacto el año pasado. “Después de la primera ola, se dieron cuenta de que había muchas personas que resultaron infectadas. La gente se relajó y en diciembre hubo una segunda ola con más casos y más muertos”, sostuvo.

Aunque son casos distintos, porque Manaos no contaba con un plan tan amplio de vacunación, Agudelo sí reiteró la necesidad de respetar las medidas hasta que la inmunización esté lo suficientemente avanzada para evitar riesgos .

37,7 %
de la población de EE. UU. ya se vacunó con dos dosis, según la U. Johns Hopkins.

Escanee el código QR y vea cuáles son las claves del debate sobre las patentes de las vacunas anticovid.

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