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Correa: el nuevo Minambiente está contra el tiempo
La delimitación de Santurbán y el puerto de Tribugá son solo algunos de los desafíos del funcionario.
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De acuerdo con el Ideam, en 2019, la reducción de la deforestación
fue del 19,2%, mientras que en 2018 fue el 10%. FOTO Esteban Vanegas
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Carlos eduardo Correa
Nuevo ministro de Ambiente
29 de septiembre de 2020
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La lista de desafíos del nuevo ministro de Ambiente, Carlos Eduardo Correa, se resume, en términos generales en cinco tareas: frenar la deforestación, decidir el futuro de Santurbán, ponerse al día en los licenciamientos ambientales, fijar su posición sobre glifosato y convencer al Congreso de que ratifique el acuerdo de Escazú.
Sin embargo, no le quedará fácil, básicamente, porque tendrá que mostrar resultados en un año y 10 meses, que es lo que le queda al gobierno de Iván Duque.
No obstante, analistas coinciden en que su perfil técnico-político puede ayudar a que algunos temas avancen. A esto se le suma que Correa tendrá que sortear un fenómeno de La Niña que, según el Ideam, se podría dar de aquí a final del año y eso podría acaparar su atención.
Mauricio Madrigal, director de la Clínica Jurídica de Medio Ambiente y Salud Pública de Los Andes, explicó que, entre los desafíos macro de Correa, está el de actualizar y publicar de manera participativa y abierta la política nacional del agua, que se vence en un año: “Frente a tareas puntuales existen muchas relacionadas con temas mineros, deforestación, tráfico ilegal de especies y ordenamiento ecológico del territorio. Sin embargo, es clave la ratificación del acuerdo de Escazú”.
Explicó que este es el primer tratado internacional de la región en reconocer a las personas defensoras del ambiente. “Desarrolla un sistema de estándares sobre el acceso a la información, participación y justicia en asuntos ambientales y es fundamental para prevenir conflictos. A su vez, brinda una mayor seguridad jurídica para todas las personas y sectores”, dijo.
Madrigal explicó que si bien el ministro saliente, Ricardo Lozano, lo impulsó, se requiere de una acción decidida, “pues el instrumento se encuentra pendiente de su radicación en el Congreso”.
Fernando Trujillo, director de la Fundación Omacha, indicó que para él el desafío que tiene Correa es unificar las cifras de deforestación ya que hay varios referentes. “El gobierno dice que disminuye en un 10 %, mientras otras organizaciones hablan de un aumentado. Ahora bien, más allá de datos, tenemos que llegar a las regiones donde hay tala no solo con el Ejército, sino con proyectos productivos, con gobernanza; ese es uno de los retos grandes. Y no le compete solo al nuevo ministro, sino que tiene buscar la manera de articular al gobierno”.
Otras tareas
Ahora bien, Correa llega con un perfil distinto a los que han tenido sus antecesores. Pero eso no es novedad. El país pasó de tener a un abogado, Gabriel Vallejo, y luego a un ingeniro, Luis Gilberto Murillo, al frente de la cartera ambiental, en el último periodo de Juan Manuel Santos. Duque se estrenó con un geologo, Ricardo Lozano, y ahora el mandatario se la juega con un administrador de empresas de Eafit, exalcalde de Monteria y quien le ha apostado la sostenibilidad. La recuperación del Río Sinú ha sido una de sus banderas.
“Correa no es un funcionario del sector ambiental, pero ya nos dimos cuenta de que un biólogo de ministro no lo hace necesariamente bien. Tiene que rodearse de gente competente, escuchar. Está en un momento importante, porque estamos en el proceso de formulación del plan de investigación para los próximos diez años. Va a estrenar un nuevo esquema de investigación a nivel ambiental”, dijo Trujillo.
Continuando con sus desafíos, Rodrigo Botero, director de la Fundación para la Conservación y el Desarrollo Sostenible, indicó que, por ejemplo, el problema de la deforestación es una manifestación de la apropiación de tierra: “Si esto es así, su principal reto es recuperar las tierras apropiadas, que han sido deforestadas en los últimos 6 años. Se tendría que enfocar todos sus esfuerzos en la recuperación de esos predios, que son predios de la nación y restaurarlos”.
Agregó que, además del tema de la tala, hay otros problemas por solucionar en los que se necesita de un Ministro abierto a la comunidad: “El país está encendido con las licencias ambientales en proyectos grandes: Santurbán, Jericó, Tribugá, transversal de La Macarena. Ahí se debe abrir una ventana de participación en el seguimiento de los grandes proyectos de licencia ambiental”.
Además, dijo Botero, esto toma relevancia en el marco del afán del Gobierno por la reactivación económica, “por eso es que se debe poner la ventana de participación pública, porque va a haber una presión extraordinaria sobre la Anla”.
En ese sentido, la profesora Sandra Vilardy, directora de Parques Cómo Vamos, explicó que en este proceso de reactivación económica se debe poner a la naturaleza en el centro “pensada en la restauración y la regeneración económica para la adaptación climática. Correa deberá enfrentar La Niña y por lo tanto debería enfatizar en la gestión del agua y de los humedales del país”.
Por ahora, se espera que en los próximos días se realice la posesión de Correa y así trace las primeras líneas de cómo enfocará la cartera.
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