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Ante el inevitable crecimiento de la pobreza, ¿qué salidas existen?

La Cepal anunció un aumento de 28,9 millones de personas en esa situación a cierre de año.

  • La Cepal anunció un aumento de 28,9 millones de personas en esa situación a cierre de año. FOTO CAMILO SUÁREZ
    La Cepal anunció un aumento de 28,9 millones de personas en esa situación a cierre de año. FOTO CAMILO SUÁREZ
14 de mayo de 2020
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Asegurar al menos un plato de comida al día es imposible para 820 millones de personas, y una amenaza para otras 2.000 millones. El diagnóstico lo entregó la Organización de Naciones Unidas (ONU) y es la base de la tesis de aquellos gobiernos, organismos multilarelaes, bancos, empresas y expertos que dicen que por pobreza también se muere la gente.

Un panorama que puede agudizarse de no encontrar políticas económicas lo suficientemente sólidas para atender a los ciudadanos que no contarán con el ingreso mínimo mensual para atender necesidades básicas de comida y manutención, monto que para Colombia es de 257.433 pesos, en el caso de la línea de pobreza, y de 117.605 en la extrema.

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) dio a conocer las proyecciones en términos de pobreza y pobreza extrema en la región, a cierre de 2020, por cuenta de la pandemia. El análisis del organismo no tuvo en cuenta los más recientes anuncios gubernamentales para mejorar las condiciones de la población vulnerable (ver Paréntesis).

Las conclusiones no son alentadoras. La Cepal prevé que 28,9 millones de personas, en América Latina, van a entrar al conjunto de ciudadanos a quienes les es difícil tener dinero para un plato de comida al día; lo que quiere decir que se llegará a las 214,7 millones –un 34,7 % de la población de la región–. Colombia, de acuerdo con la Cepal, pasará de un 29 % de población en esa situación, a 31,5 % (rozaría las 10 millones).

El panorama tampoco mejora para la pobreza extrema –quienes viven con menos de 1,25 dólares al día– pues la región pasará a tener un total de 83,4 millones de ciudadanos en ese conjunto, por la adhesión de 15,9 millones de personas. El pronóstico para Colombia es un aumento del 10,7 % al 12 % de la población (superaría los 3,5 millones).

Las soluciones

Alicia Bárcena, secretaria general de la Cepal, aseguró que si bien el momento es retador hay con qué responder y la unión de fuerzas podrá hacer menos pesada la carga que sí o sí deberán cargar los estados de esta parte del mundo.

Una de las opciones más fuertes que ve la Cepal para revertir el aumento de indicadores de pobreza es asegurar un ingreso para las personas más afectadas. Monto, que según la Cepal, debe estar arriba de la línea de pobreza de cada país.

“Construir el Estado de bienestar y sistemas de protección social universales es clave para evitar otra década perdida (...) Para salir de la crisis es necesario repensar el modelo de desarrollo y consolidar las dimensiones económicas, sociales y ambientales del desarrollo sostenible”, expresó Bárcena en la presentación del informe. Colombia no es ajena a esa situación.

La vicepresidenta, Martha Lucía Ramírez, dijo que el país se enfrenta al reto de saber reactivar su economía, pues de lo contrario las cifras de pobreza podrían tener un incremento significativo, con retrasos de hasta una década, de no ejecutarse planes para la puesta en marcha de sectores como el constructor, manufacturero y comercio.

Colombia sigue, desde el inicio de la pandemia, la ejecución de iniciativas que le aseguren un ingreso a la población más vulnerable: tres millones de familias recibirán dos giros, cada uno de 160.000 pesos, para un total de 320.000, –80.000 pesos por encima de la línea de pobreza–. Así mismo, el programa Adulto Mayor, que cuenta con 50.000 colombianos mayores de 70 años, recibirán un giro extra de 80.000 pesos. Esto sin contar los 75.000 pesos que van a recibir un millón de hogares en la segunda fase de la devolución del IVA.

Y si bien las iniciativas van en línea con lo que dicta la Cepal, un reto es asegurar que los recursos lleguen a los más necesitados, y las bases de datos estén lo suficientemente depuradas para garantizar esa entrega.

“Importa cómo se definan el monto y políticas que fortalezcan esa ayuda. El espíritu no es que todo el mundo reciba dinero, sino que sea el segmento que más lo necesita. Debemos ver cómo generar una complementariedad que enganche a los más necesitados a la vida laboral activa”, explicó Carlos Sepúlveda, doctor en Economía de la Universidad de Boston y decano de la Facultad de Economía de la Universidad del Rosario.

Sepúlveda se animó a dar otra solución: discutir, desde ya, una nueva reforma tributaria a pesar de que el presidente Iván Duque insista en que no es momento. “Tenemos una estructura que permite exenciones a empresas que generan altos costos de administración y no dan equidad sectorial. No debe ser una reforma efectiva en este contexto pues en periodos de crisis no se aguantan más impuestos. Sería bueno pensarla para los próximos dos años” .

31,5 %
sería el nivel de pobreza en Colombia a cierre de año, según la Cepal.

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