viernes
7 y 9
7 y 9
Tras el retiro del proyecto de Ley de Solidaridad Sostenible que incluía una reforma fiscal y el anuncio de un nuevo equipo económico, el presidente, Iván Duque, comenzó ayer una serie de reuniones con los partidos políticos en busca del consenso que prometió para elaborar un nuevo proyecto.
Igualmente, se oficializó la renuncia de Alberto Carrasquilla como ministro de Hacienda, quien reconoció que su continuidad en el Gobierno “dificultaría la construcción rápida y eficiente de los consensos necesarios”.
En su reemplazo fue anunciado el ministro de Comercio, José Manuel Restrepo. En su cuenta de Twitter el presidente Duque escribió: “He designado como nuevo MinHacienda a José Manuel Restrepo. Economista con maestría en Economía en London School of Economics y doctorado en Administración de U. de Bath, exrector U. Rosario, y de enorme vocación de servicio al país”.
Restrepo fue rector del Colegio de Estudios Superiores de Administración (Cesa), y de la Fundación Empresarial de la Cámara de Comercio de Bogotá. Además, es autor de un importante número de escritos entre libros, disertaciones meritorias, borradores de investigación y artículos académicos publicados en el ámbito nacional e internacional.
Sobre este nombramiento, la directora de la Cámara de Comercio Colombo Americana, María Claudia Lacouture, destacó que la experiencia y conocimiento de Restrepo serán de gran utilidad en el Ministerio de Hacienda en este momento del país que exige de todos sensatez, serenidad y apoyo a la institucionalidad y para liderar el consenso que Colombia necesita para la estabilidad macroeconómica de mediano y largo plazo.
Pero los lineamientos que deberá seguir Restrepo para el próximo proyecto de reforma tributaria que se lleve al Congreso los fijó el presidente Duque el domingo, cuando dio conocer su decisión de retirar la iniciativa de Ley de Solidaridad Sostenible.
Según el mandatario, ya hay “principios de consenso”: una sobre tasa de renta temporal a empresas, prorrogar el impuesto al patrimonio de forma temporal, incrementar el impuesto a los dividendos, transitoriamente, crear una sobre tasa de renta a personas de mayores ingresos y profundizar programas de austeridad del estado.
No obstante, el experto tributarista Julio César Leal sostuvo que los enunciados de Duque no son novedosos y ya estaban incorporados en la propuesta que se retiró.
Sugirió hacer un cambio en el orden del manejo del presupuesto que es lo que ha disparado los gastos. “Primero se define qué se gasta y luego hacen la reforma tributaria para buscar los recursos. Debe ser al revés. Primero saber qué plata hay para después hacer el presupuesto”.
Y también abogó por un acuerdo nacional para cambiar el manejo de los recursos. “No se puede dejar en manos de los políticos el presupuesto. Hay que hacer el manejo de forma independiente”.
Para los investigadores económicos del Banco Itaú este proyecto de ley no solo es necesario para sufragar los costos provenientes de la crisis generada por la covid, sino para apuntalar las fuentes de ingresos estructurales para frenar el crecimiento de la deuda y evitar un escenario de pérdida de la calificación de grado de inversión.
Ante la firme oposición a aumentar la presión fiscal sobre las personas naturales (que habría generado la mayor parte de los ingresos según el plan fiscal propuesto), el Gobierno se queda con opciones limitadas y corre el riesgo de perjudicar el crecimiento.
“Las autoridades tendrán que decidir entre gravar más el capital y los beneficios de las empresas, hacer recortes más bruscos del gasto en un momento en que el apoyo fiscal sigue siendo vital en el proceso de recuperación, o enfrentarse a la reacción del mercado ante la percepción de que el deterioro fiscal es irremediable”, anotó Itaú.
En esa línea, Renzo Merino, analista de Moody’s, planteó que “el retiro de la propuesta de reforma fiscal por parte de las autoridades es negativo desde una perspectiva crediticia ya que genera incertidumbre sobre la capacidad del Gobierno para conseguir la aprobación de medidas que apoyen el proceso de consolidación fiscal en el mediano plazo” (ver Para saber más).
Aunado a lo anterior, la prolongación de la pandemia continúa afectando los niveles de bienestar económico, incrementado con ello la necesidad de crear espacio fiscal para mayores apoyos a la población a través de programas sociales.
“A la luz de los eventos recientes, Moody’s reevaluará los elementos que fueron encontrados a finales del año pasado cuando la agencia calificadora asignó una perspectiva negativa a la calificación de Colombia. Fundamental en este respecto será determinar si el resultado final del debate en torno a temas fiscales será conducente a una mejora en las cuentas gubernamentales y las métricas de deuda durante los próximos años”, concluyó Merino.
En un contexto de protestas, que siguieron ayer pese al anuncio de retiro de la reforma, los mercados de divisas y de valores no fueron ajenos y reaccionaron con fuerza.
Así, por ejemplo, la Tasa Representativa del Mercado del dólar (TRM) observó un aumento de 76,51 pesos, pues arrancó la semana en 3.740,14 pesos e inicia este martes en 3.816,65 (ver gráfico).
Para los analistas económicos de Bancolombia el desempeño de la divisa estadounidense estuvo influenciado por la mayor percepción de riesgo país, luego de que se conociera el retiro del proyecto de Ley de Solidaridad Sostenibilidad y la renuncia del ministro de Hacienda, incrementando la incertidumbre fiscal del país ante la espera del nuevo proyecto de reforma.
A su turno el principal índice de la Bolsa de Valores de Colombia, el Colcap, se contrajo un 2,72 %, pues arrancó las negociaciones en 1.250,65 unidades y cayó a 1.216,62.
A su turno, los analistas de Davivienda Corredores precisaron que los mercados locales se desvalorizaron en abril después de la presentación a mediados del mes de la reforma tributaria por parte del gobierno ante el Congreso que recibió el rechazo de varios partidos políticos y causó presiones sociales