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¿Quién compra botellas de vidrio en Medellín?
Cierre de planta de Peldar en Envigado tiene en alerta a los recicladores. La empresa asegura que próximamente normalizará las compras del material.
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En bodegas como las de Recimed, en el Centro de Medellín, se acumula el vidrio que, según dicen, nadie compra. Urgen medidas de contingencia para solucionar este problema. FOTO Jaime Pérez
24 de mayo de 2019
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De los desechos sólidos que mensualmente se generan en el Valle de Aburrá los recicladores rescatan unas 300 toneladas de vidrio, material que hasta el 30 de marzo era adquirido por Peldar.
El cierre de la planta de esta compañía en Envigado, que trasladó esta operación a Zipaquirá, en Cundinamarca, causó un desajuste en el negocio, al punto que empresas dedicadas a la recolección de botellas y vidrio plano para reciclar, redujeron o pararon estas compras.
“Nosotros movíamos unas 70 toneladas y ahora estamos despachando cinco”, expresó Javier Montoya, gerente de Trans, empresa de reciclaje, quien añadió que ante el aumento de vidrio sin doliente, este irá al relleno sanitario.
En la misma línea se expresó Leonardo Gómez, director de la Cooperativa Multiactiva de Recicladores de Medellín (Recimed), quien dijo que esto se ha convertido en un problema que esta ocasionando pérdidas millonarias.
“Para dar cumplimiento a convenios y contratos de prestación del servicio público de aseo, nos vemos en la obligación de comprar todo el vidrio que nuestros recicladores recuperan, todo ese material termina almacenado en nuestra bodega, ocupando espacio y sin tener quién lo compre, lo que ha ido en detrimento de nuestra economía”, comentó.
Peldar responde
Mediante un comunicado la compañía señaló que tras el cierre de la factoría en Envigado, el punto de acopio de vidrio pasó a operar desde el primero de abril “en un nuevo lugar de recepción en el municipio de Bello, norte del Valle de Aburrá, con un área de más de mil metros cuadrados”.
En la nota también se lee que en los últimos meses, la empresa observa un alto inventario de vidrio reciclado, dado el proceso de cierre de la planta de Envigado y la transición hacia la operación del nuevo horno en Zipaquirá.
“A esto se suma una baja disponibilidad en la oferta de camiones de carga externos para el traslado de dicho material, lo que conllevó a una menor compra de vidrio. Esta situación ha sido temporal y se espera retomar los niveles de compra durante las próximas semanas”, agregó el texto.
Montoya y Gómez confirmaron que el acopio al que se refiere Peldar es manejado por la firma Ecocircular, y lo cuestionaron por estrecho. Este diario intentó obtener una versión de los administradores de esta empresa, pero declinaron hacer algún tipo de comentario.
Las cuentas
Según Peldar, el año pasado adquirió 129.000 toneladas de vidrio en todo el país, es decir que aproximadamente 1,5 millones de envases de vidrio fueron reciclados cada día para convertirse en nuevas botellas (ver ¿Qué sigue?).
En las adquisiciones a las comunidades recicladoras del Valle de Aburrá, la compañía aseguró que invirtió unos 10.000 millones de pesos, y se comprometió a que, una vez normalizada la operación, se incrementará la cantidad de compra.
Pero, ¿por qué dejar un negocio de 10.000 millones? Recimed sostiene que una tonelada de vidrio reciclado cuesta 150.000 pesos, y transportarla en camión hasta Zipaquirá valdría más de 300.000 pesos, lo que hace inviable reciclar vidrio en Medellín.
Mientras Peldar insistió en que durante más de 40 años ha mantenido el compromiso con la sostenibilidad y medio ambiente a través de sus exitosos programas de reciclaje, los recolectores del material se declaran expectantes por la solución. Por su parte, voceros del Área Metropolitana, autoridad ambiental del Aburrá, dijeron que el tema se abordará en la mesa regional del Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos, para evaluar qué gestión es posible hacer.
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