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Wall Street cerró este jueves sin una tendencia consolidada tras una sesión volátil que recibió positivamente los datos de las ventas minoristas de Estados Unidos un día después de su peor jornada del año.
Al cierre, el Dow Jones Industrial Average subió 0,39 % a 25.578,00 puntos y el Nasdaq cedió 0,13 % a 7.763,68 puntos. El índice compuesto S&P 500 avanzó 0,3 % a 2.847,66 puntos.
El miércoles las acciones en Estados Unidos cayeron con fuerza por el temor de los inversores de que se acerque una recesión y el Dow Jones registró las peores pérdidas en lo que va del año.
La sesión de ayer estuvo caracterizada por la volatilidad, con los principales indicadores pasando del verde al rojo. Durante la tarde los inversores cedieron al miedo después de que los rendimientos de los bonos del Tesoro a 30 años, que nunca había caído por debajo de 2 %, bajó a 1,91 %.
“Es un mercado esquizofrénico, influenciado por los rendimientos de las obligaciones y los grandes titulares de la actualidad. Esto hizo que el mercado evolucionara en sentidos contrarios”, explicó Lindsey Bell del Independent Fundamental & Forensic Investment Research (CFRA), una firma independiente de inversión.
El experto atribuyó las oscilaciones a las informaciones sobre la guerra comercial entre China y Estados Unidos y a las fluctuaciones de los rendimientos de los bonos del Tesoro.
La caída de los rendimientos se considera como un indicador de una caída de la confianza en el crecimiento a medio y largo plazo. Las ventas minoristas en Estados Unidos subieron 0,7% en julio, superando las expectativas y reafirmando a los inversores de que el consumo sigue siendo robusto.
Por otro lado, la producción industrial de Estados Unidos cayó 0,4 %.
De hecho, las bolsas de ambos lados del Atlántico sufrieron fuertes caídas por el temor desatado por malos datos económicos de China y Alemania y movimientos en los bonos estadounidenses que presagiaron nuevas dificultades.