Las primeras palabras de Jesús al iniciar su vida pública (Mateo 4, 12-23) constituyen una invitación a cambiar. Convertirse, en el sentido original del vocablo griego, significa cambiar de mentalidad, reorientando la vida entera hacia Dios.
Jesús agrega el porqué de su invitación a la conversión: “porque el reino de los cielos está cerca”. “Reino de los cielos” significa lo mismo que reino de Dios. Es una expresión propia del Evangelio de Mateo, dirigido originariamente a los cristianos provenientes del judaísmo, en el que se evita por respeto pronunciar el nombre de Dios. Cuando Jesús habla de este reino se refiere no a un territorio o dominio político, sino al poder salvador de Dios que quiere establecer en la humanidad un porvenir nuevo de...