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El partido Demócrata de los Estados Unidos acaba de proponer un proyecto de ley, como parte de un plan de emergencia para apoyar financieramente a las personas frágiles en su economía y para acelerar su reactivación económica. Propone el proyecto la creación de un medio de pago definido como “el dólar digital”, esto es, una unidad de valor electrónico, expresado como un saldo en valor monetario, formado por giros digitales, los cuales serán administrados por la Reserva Federal de los Estados Unidos.
Publicó la prestigiosa revista inglesa The Economist, el pasado 8 de mayo, un artículo titulado: The rise of e-money. The digital currencies that matter. Los entrecomillados a continuación contienen mis traducciones del artículo citado.
“Las monedas digitales de los gobiernos o de los bancos centrales son el paso siguiente en la evolución del dinero. Paso que nos traerá problemas, porque centralizarán el poder en el estado en lugar de distribuirlo entre las redes y los monopolios financieros. La idea tras las monedas digitales es simple. En lugar de tener una cuenta en un banco comercial, la tendrá usted en un banco central y la usará por medio de una app como Alipay or Venmo. En lugar de girar cheques y pagar por medio de una tarjeta de crédito, utilizará usted los canales del banco central. Y su dinero quedará garantizado por la fortaleza del Estado y no por un banco endeble. ¿Desea usted comprar una pizza o ayudarle a un familiar en dificultades? Pues no necesitará negociar con el Citibank ni con Mastercard para pagarla: El Banco de Gran Bretaña y la FED estarán a su servicio”.
“Suena forzada la metamorfosis de los bancos centrales que los mudará de ser los aristócratas de las finanzas a ser sus obreros; pero está en camino. Hoy día, cerca de 50 expertos monetarios, en representación de los países más ricos del mundo, están explorando las monedas digitales. Las Bahamas y China ya tienen monedas digitales. La Unión Europea espera tenerlas en 2025. Y EE.UU. también está construyendo ya su dólar electrónico”.
“Si las monedas de los gobiernos se generalizaren, se convertirán en la herramienta para controlar a los ciudadanos por medio de multas, por mal comportamiento. Pero también podrían alterar la geopolítica facilitando el conducto para enviar pagos cruzando las fronteras y para debilitar continuar guardando las reservas monetarias en Estados Unidos. El reinado del dólar se basa en su apertura a los mercados de capitales y su respeto a los derechos de propiedad, con lo cual no puede rivalizar China...Temen los países pequeños que, en lugar de usar sus monedas domésticas, bien podrían las gentes optar por las monedas electrónicas, causándoles el caos”.
“Tanto los gobiernos como las firmas financieras deben prepararse para un nuevo cambio en la forma como funciona la moneda, cambio tan enorme como haber pasado de las monedas a las tarjetas de pagos. Significa esto reformar la forma como funcionan los bancos centrales y preparar los bancos comerciales para un rol más periférico. Las monedas estatales nos causarán el siguiente gran cambio en las finanzas y promete ser mucho más trascendental que sencillo”.
