“Los besos son como las lágrimas, los únicos reales son los que no puedes contener”. Anónimo
Como describe Alain Montandon en un delicioso libro sobre el beso, el significado de este tiene un amplio espectro que puede ir desde una simple “yuxtaposición anatómica de dos músculos orbiculares en estado de contracción” que “mueve 9 miligramos de agua; 0.18 de sustancias orgánicas; 0.7 de materias grasas; 0.45 de sal; centenares de bacterias y millones de gérmenes”; hasta parte de un ritual de aceptación como el de los adiguesios en el Cáucaso ruso, en el que un extranjero era aceptado en el grupo social cuando “rozara superficialmente con sus labios el seno de la mujer del anfitrión”.
La semana anterior Alexandra Alzate, una colombiana que tiene en...