Por Jeff Merkleyredaccion@elcolombiano.com.co
Los republicanos del Senado están en medio de lograr uno de los asaltos más grandes en la historia americana: el robo de un puesto en la Corte Suprema de los Estados Unidos. Y este robo, si tiene éxito, tendrá un impacto enorme sobre la integridad de la Corte Suprema y serios asuntos desde los derechos reproductivos y laborales hasta la protección ambiental y al consumidor.
Este crimen contra nuestra Constitución empezó cuando el juez Antonin Scalia murió hace casi un año. Los republicanos del Senado decidieron ese día, antes de que el presidente Barack Obama nombrara un candidato para ocupar el puesto, que rechazarían su deber constitucional de ofrecer “consejo y consentimiento” para cualquier nominado...