Hasta hace pocos años la posibilidad de informar estaba en manos de unos pocos. Unos cuantos privilegiados y poderosos tenían el monopolio de poner en letras de molde o en su propia voz o en imágenes, a través de los canales de televisión y radio, su propia versión de los hechos. Esto no era sano, pues ellos solo contaban lo que querían, lo que les convenía, lo que necesitaban que la gente pensara. Por eso se dice que la historia siempre la escribieron los ganadores; y los ganadores eran los que, entre otras, tenían poder a través de los medios informativos.
Pero la revolución informativa que generaron las redes sociales a través de la internet, no tiene precedentes. Ahora ‘cualquiera’ puede expresarse, publicar su versión, sus imágenes, su pensamiento....