Un interesante mosaico de personajes antioqueños que han forjado la vocación de liderazgo –con base en el coraje, el emprendimiento, el trabajo y la honradez, en las distintas áreas del comportamiento humano– presentó este periódico para conmemorar los 107 años de su fundación.
La escogencia fue acertada. Mas, como toda selección, que forzosamente conlleva a exclusiones y tiene alta dosis de subjetividad, la vitrina es susceptible de ampliarse con otros talentos que pueden tener similar fortaleza de liderazgo que la construida por el periódico.
Comencemos armando el mosaico con José María Córdova, el más importante general colombiano de la guerra de independencia. Sigamos con Pedro Justo Berrío, el visionario gobernante. Continuemos con Pepe Sierra, quien enseñó a los bogotanos cómo producían riqueza los paisas. Recalemos en los poetas Porfirio Barba Jacob y León de Greiff. Pensadores e intelectuales como Rafael Uribe Uribe, Luis López de Mesa, Baldomero Sanín Cano, Alejandro López, Gerardo Molina, Gonzalo Restrepo Jaramillo. En la escultura, Rodrigo Arenas Betancur. Dos mujeres, Blanquita Uribe en el piano y Ximena Restrepo, en el atletismo olímpico. Esteban Jaramillo, el economista, padre de la hacienda pública moderna en el país. Gonzalo Mejía, el visionario quien miró a Urabá como polo de desarrollo nacional. Fidel Cano y Fernando Gómez Martínez, dictando cátedra de tolerancia, ética e independencia en el periodismo. Antonio José Restrepo –Ñito–, jurista, internacionalista, orador. El presidente Carlos E. Restrepo, apaciguando los ánimos pendencieros de copartidarios y contradictores. Los presidentes de la Andi, Fabio Echeverri y Cipriano Restrepo Jaramillo. Empresarios, en la época de los “dones”, como don Alejandro Ángel, don Jesús Mora, don Vicente Uribe Rendón, don Gustavo Toro. Diego Calle quien modernizó a Empresas Públicas, represando aguaceros para transformarlos en energía. Fernando González, el filósofo iconoclasta. Efe Gómez y Manuel Mejía Vallejo, interpretando con cuentos y novelas la idiosincrasia del pueblo raso. Jaime Jaramillo Uribe, escrutador profundo de las raíces de la historia. Pedro Nel Gómez con sus murales y pinturas que escandalizaron a una sociedad pacata. El caricaturista Ricardo Rendón, insuperable con sus trazos para satirizar los excesos de presidentes y políticos colombianos. Ramón Hoyos devorando trochas y vías para ser pentacampeón de ciclismo...
Este es un simple ejercicio “a mano alzada”. Queremos mostrar –sin sobredimensionar el liderazgo paisa–, que en la región el talento no ha sido esquivo y menos cicatero. Y que recordando aquellos valores humanos, se contribuye a contrarrestar la imagen de los grandes capos de las mafias, que han seducido a productores y libretistas de narconovelas, para mostrar el rostro de la tierra, embadurnado de lodo.
Se pueden hacer más listas con personajes que enaltecen la región. De intelectuales, artistas, deportistas, empresarios, catedráticos, hombres de ciencia, tecnología, investigación, que confirman lo escrito por Jorge Mario Velásquez, presidente del Grupo Argos, como presentación a la novedosa edición de aniversario de EL COLOMBIANO: “Antioquia cuenta con experiencias relevantes e inspiradoras de éxito en diferentes sectores, con una tradición soportada en valores, con historias que nos inspiran”. Porque el hombre, como lo escribía Gonzalo Pérez, presidente de Suramericana, invocando a Ortega y Gasset, “no tiene naturaleza, lo que tiene es historia”.