Por Bernardo A. Guerra Hoyos
Cual cueva de Rolando, el Hospital Departamental La María se ha convertido en una caja de sorpresas por las actividades de sus directivos, cuyas actuaciones sospechosas son cuestionadas por los organismos de control.
Estando La María bajo la gerencia del médico Misael Cadavid Jaramillo, se abrieron tres licitaciones entre finales del 2017 e inicios del 2020 para la construcción de las torres hospitalaria y administrativa, con un valor inicial de 36 mil millones de pesos, más las adiciones para un costo final de 56 mil millones, y una tercera para la concesión de parqueaderos.
Eso estaría muy bien, si no fuera porque las prioridades del país y del departamento se centraban en ese momento de pandemia del covid 19 en proporcionar camas UCI y atención médica de urgencia a los numerosos afectados por la enfermedad, no en edificar torres de oficinas y parqueaderos.
El gerente del Hospital adelantó esas extrañas licitaciones y el respectivo proceso de contratación, que fue cuestionado tanto por voceros de la opinión pública, medios de comunicación y empleados como por la Cámara Colombiana de Infraestructura (CCI), como consta en varias comunicaciones de esa importante agremiación.
Se adjudicó la construcción de la torre administrativa de oficinas al consorcio CCC La María, único proponente, por valor de 15.552 millones y la interventoría por 1.090 millones.
Llamó entonces la atención que el gerente del Hospital dirigiera una carta al presidente Duque, el 18 de marzo de 2020, manifestándole que no tenía recursos para comprar tapabocas y otros elementos para atender la pandemia, cuando se estaba gastando semejante dineral en una obra no prioritaria para el momento de la pandemia.
La CCI formuló observaciones a esta licitación en cuanto a los requisitos por experiencia exigida, capacidad financiera excluyente y calificación subjetiva del factor técnico.
No obstante esos cuestionamientos, se adjudicó, al único proponente habilitado, el contrato por la suma mencionada con una adición de 7.665 millones de pesos, casi el 50 % del valor original.
La licitación de la construcción por concesión de la torre de parqueaderos se adjudicó a un único proponente que luego se declaró en quiebra.
Los medios digitales Vorágine y Cuestión Pública han informado ahora que la Fiscalía abrió investigación penal contra el médico Cadavid Jaramillo y el abogado contratista Alberto Hincapié Giraldo.
Vorágine también informó que una de las pólizas que respalda uno de los contratos resultó falsa, igual a lo ocurrido con Centros Poblados.
Según estos medios, el pasado 7 de septiembre la Fiscalía les formuló imputación por los delitos de “celebración de contratos sin el cumplimiento de requisitos legales a título de dolo, en concurso heterogéneo con los delitos de falsedad ideológica en documento público, agravado por el uso”.
Presuntos delitos supremamente graves que tienen como víctima y denunciante al Hospital La María y como imputado a su exgerente y al abogado contratista mencionados.
El Hospital La María se ha visto comprometido en varios episodios de corrupción como, entre otros hechos, las célebres cirugías estéticas del cuestionado excontralor departamental Sergio Zuluaga Peña y otros funcionarios.
Post Scriptum: Daniel Quintero fue gerente, un tiempo, de la pasada campaña a la presidencia de Humberto de la Calle. Este lo retiró intempestivamente. ¿Sería por algunas indelicadezas? Y el gerente de campaña en Medellín fue Albert Corredor, concejal del Centro Democrático, actualmente con serios cuestionamientos