Luego de subir por el río Magdalena, el viajero se bajaba del barco en Puerto Nare y se embarcaba aguas arriba por el río Nare, hasta llegar a Juntas. Allí empezaba la última etapa de su viaje, antes de llegar a Medellín, lleno de aventuras, sorpresas y encanto.
“De todas maneras los saltos y ríos arremolinados eran un grave peligro. Parecía que fueran colocados como prueba antes de dar permiso de ingresar a Antioquia. Por eso las pendientes del Nare las entendíamos como una escala muy dificultosa de subir”.
En la época dorada de la Gran Colombia (1819 a 1830), la corona sueca encargó al teniente de marina Carl August Gosselman la misión de investigar sobre la minería y el comercio en nuestro país. Como fruto de su primer viaje en 1825-1826 escribió...