Creen algunos que alcanzar un sueño significa satisfacer un deseo imposible o llegar a una meta que siempre parece alejarse y para conseguir este propósito los más osados están dispuestos a cualquier heroísmo o villanía; en cambio, otros piensan que alcanzar un sueño solo significa dormir y los más simples se limitan a contar ovejas con la luz apagada.
Dormir parece una empresa muy poco arriesgada, pero puede que el insomne con los ojos abiertos en la oscuridad se vea obligado también a realizar grandes hazañas imaginarias, que no desmerecen a las que realizan en la práctica los héroes o los villanos para conquistar un ideal.
Con la cabeza en la almohada cada insomne afronta con una estrategia distinta la dura travesía de la noche. Unos se ponen...