Por GUILLERMO E. ARISMENDY DÍAZguiarismendy@yahoo.es
Sin asomo de vergüenza, la Sala Plena de la Corte Constitucional acaba de declarar exequible la Ley 1821 de 2016 que aumentó hasta los 70 años la edad de retiro forzoso para funcionarios públicos. Sin embargo, detrás de la bondad de la norma, existieron intereses para que los altos dignatarios de la justicia y otros servidores públicos pudieran atornillarse en sus cargos hasta la extrema vejez.
Esa norma no se expidió para quienes reciben bajos salarios. Pero quienes reciben 30 millones o más al mes como salario, no se quieren pensionar con la mitad de ese ingreso. Entendible. Lo que va a ocurrir es que los que están en esos cargos adquieren el derecho de atornillarse hasta los 70 años sin que...