No sigan metiéndonos culpa: no somos los ciudadanos los que podemos combatir el plástico. Nosotros nos tenemos que resignar a que todo lo que compramos viene empacado en plástico. ¿O podemos pedir en el supermercado que nos viertan jabón líquido en un envase de vidrio para almacenarlo allí y no llevar plástico a la casa? ¿O que se venda la leche en los inolvidables envases de vidrio para evitar el plástico de las bolsas? ¿O se pueden sacar las mazorcas del recipiente de icopor y envoltura plástica, antes de pasarlas por la registradora? Son ustedes, señores productores y comerciantes de grandes superficies, los primeros que tienen que cambiar el chip. Eso de reciclar en la fuente está tergiversado: lo que se debe hacer es no producir plástico. Si hace 40 años vivíamos sin plástico, ¿por qué ahora no podemos? Muy raro que con todo lo que hemos avanzado, con lo innovadores que somos y la tecnología de punta que hemos desarrollado y aún no podamos reemplazar masivamente el plástico por materiales menos agresivos con el planeta.
Después de hacer cálculos las empresas dirán que es más barato un recipiente de plástico que uno de vidrio y rasgarán sus vestiduras excusándose de que no pueden trabajar a pérdida (no es lo mismo no ganar lo pretendido, que sacar los ahorros). O darán la disculpa, la misma que se dijo cuando sacaron de circulación los envases de vidrio para la leche, de que era más aséptico el plástico que se usa y bota, que lavar, “mal lavado”, los entonces reutilizables envases de vidrio. Si eso fuera cierto hoy, ¿por qué todavía se vende cerveza en envases de vidrio? ¿Pierden plata las cerveceras lavando botellas o les quedan mal lavadas?
La decisión de no contaminar más con plástico la tiene que tomar el que produce plástico y el que usa plástico como recipiente para sus productos (cambien de material); o, al menos, permítanos a los consumidores llegar al supermercado o al almacén y recibir el producto en otro empaque, como ya hace el supermercado Ekoplaza, de Ámsterdam, que tiene un pasillo con unos 700 artículos libres de plástico: carnes, salsas, cereales, yogures, etc. empacados en vidrio, metal o cartón. Lo mismo hicieron Original Unverpackt, en Berlín y Unpacked y YesFuture, en España. ¿Cuál será el paisa emprendedor que hará lo mismo en Medellín?.