Artistas, empresarias, funcionarias y líderes de proyecto ya asumen un rol protagónico en la escena regional de las criptomonedas.
El 15 % del total de usuarios de criptodivisas (unos 295 millones en todo el mundo para el cierre de 2021, según estimaciones) son mujeres, explica el “Reporte global sobre mujeres, criptodivisas e independencia financiera”. El informe indica que el interés en las criptomonedas no tiene género y detalla que el objetivo de ingresar a este ámbito obedece a distintos motivos: al 36 % le llamó la atención la tecnología involucrada (como blockchain), un 14 % detectó una oportunidad de inversión y ahorro a largo plazo y el 12 % vio una opción para realizar transacciones y enviar/recibir remesas.
Mucho más que usuarias
Las latinoamericanas son un caso ejemplar de la presencia femenina en el sector cripto, y en ese sentido desde diversos frentes de la industria (gobierno, exchanges, proyectos de NFTs), las mujeres de Latinoamérica aportan su talento a la construcción del sector cripto regional. Aquí le presentamos a algunas protagonistas:

1. Mónica Taher, directora de Asuntos Tecnológicos y Económicos del gobierno de El Salvador. Es un personaje clave para consolidar el proyecto bitcoin en el país centroamericano: entre sus funciones está la de promover la inversión en el ecosistema cripto local (que incluye al proyecto Bitcoin City) y el desarrollo de iniciativas educativas que fomenten el conocimiento sobre los criptoactivos).
La funcionaria está convencida de que bitcoin, al impulsar la inclusión financiera de la población, marcará una gran diferencia en la vida de los salvadoreños. De hecho, cree firmemente en que la economía cripto es el futuro. “Para allá vamos, aunque no le guste a medio mundo”, dijo.
2. Anna Lezama, cofundadora y jefa de Operaciones de Panda Group. En las duras condiciones económicas que enfrentaba en su natal Venezuela descubrió las ventajas de las criptodivisas, pero también sus obstáculos: no era fácil cambiarlas a moneda de uso común. La dificultad impulsó la creación de Panda Exchange. Junto a los otros cofundadores, “dijimos, bueno, por qué no hacemos un exchange nosotros mismos, si somos los que estamos viendo la necesidad”. Con sede en Colombia, la casa de cambio de criptoactivos -con 16.000 usuarios registrados- forma parte de una organización que incluye soluciones de procesamiento de pagos con criptomonedas, gestión de cajeros automáticos de criptodivisas y servicios de consultoría en tecnología blockchain.

3. Silvina Moschini, presidenta y productora ejecutiva de Unicorn Hunters. Referente de los unicornios latinoamericanos, la empresaria argentina es ampliamente reconocida por promover el trabajo remoto a través de Transparent Business (desde mucho antes de la pandemia) y por su apuesta por la equidad de género mediante la plataforma She Works!.
Su proyecto más reciente, junto a Alex Konanykhin, es el lanzamiento de unicoin, una criptomoneda de última generación que paga dividendos y está respaldada por capitales privados de compañías con potencial de crecimiento. La característica más sobresaliente de Unicoin es que fue diseñada para solucionar la volatilidad extrema de los tokens tradicionales y ofrece a sus tenedores una solución alternativa frente a la inflación. Unicoin se destaca, además, por contar con el respaldo de la plataforma Unicorn Hunters, que permite a los espectadores invertir en compañías de alto crecimiento. Para Moschini esta conexión es clave, ya que permite acoplar el ritmo de la innovación y el de la inversión. “La idea es conectar a aquellas personas que buscan invertir en negocios con potencial de transformar el mundo a emprendimientos y fundadores mediante blockchain”, declara Moschini.
4. Bea Ramos y Yehudit Mam, fundadoras de Dada.art. Desde Nueva York, Ramos y Mam crearon una plataforma de dibujo digital que, aprovechando tecnologías cripto y blockchain, crean obras colaborativas en formato NFT. ¿Qué es un dibujo “colaborativo”? Una obra que inicia un artista desde cualquier país, por ejemplo México, que puede ser complementada con aportes gráficos de creadores en Brasil, Venezuela o Estados Unidos. Para febrero de 2022, Dada.art sumaba más de 170.000 usuarios en 80 países del mundo. “Nuestros artistas se comunican exclusivamente mediante el dibujo, creando historias que pueden ser tan profundas como hermosas”, contó Mam. Además, si una obra se vende, gracias al uso de blockchain, los creadores de Dada.art reciben regalías automáticas codificadas en contratos inteligentes (Smart Contracts). Como evidencian estos casos, el sector cripto es un espacio que brinda oportunidades para la vida financiera de las mujeres latinoamericanas, y también les ofrece una plataforma para impulsar su creatividad y talento.