Corredores biológicos para proteger 5 felinos en Antioquia
Desde la caza del último jaguar se afianza un trabajo por conservar 5 especies de felinos en Antioquia.
En la noche del 24 de julio de 2012, campesinos de Amalfi cazaron un jaguar que les devoraba los animales. Se les había comido perros, gallinas, caballos y vacas.
El temor de resultar devorados ellos mismos o sus hijos que iban a la escuela los llevó a montarle guardia y cuando lo tuvieron a tiro de escopeta lo mataron.
Entonces, se puso en cuestión el hecho y mientras los campesinos argumentaron que defendían su propia vida, colectivos de animalistas llamaron la atención sobre la necesidad de proteger los felinos, al tiempo que cuestionaron la labor de las entidades oficiales.
¿Qué hacer? ¿Cómo sustentar la necesidad de preservar el animal? ¿Cómo ayudar a los campesinos a vencer su miedo?
Juan Carlos Cortés, secretario de Desarrollo Rural de Amalfi, señala que es mucha la conciencia que se ha ganado desde entonces y que en coordinación con Corantioquia y otras entidades se inició un trabajo de preservación.
La capacitación pasa por ahuyentar el animal antes que cazarlo y propender por prácticas agrícolas que no invadan el territorio del felino.
Corredores biológicos
Un informe de la Universidad Nacional sede Medellín señala que se trabaja en un corredor biológico que protegería las especies de felinos, ubicado entre el Nordeste y el Bajo Cauca y comprendería una extensión de 19 kilómetros cuadrados.
En el citado informe, Ana Fernández, estudiante de la Maestría en Bosques y Conservación Ambiental de la Facultad de Ciencias Agrarias de dicha Universidad, expone que un corredor biológico que preserve las zonas boscosas de Antioquia podría ser la única opción para proteger los felinos, amenazados por la destrucción de su hábitat y la caza ilegal.
Y sería junto a Amalfi, donde arrancaría uno de los corredores, en virtud de la caza del jaguar que se presentó en 2012. De no darse el proyecto, el informe de la Universidad plantea que todas estas especies de felinos van a desaparecer y algo peor: “los bosques no se van a comportar de la misma manera. La regulación hídrica no será la misma y eso va a terminar afectándonos a todos”.
Luz Molina, subdirectora de Ecosistemas de Corantioquia, señala que se trabaja por la conservación de la relación entre los seres humanos y estas especies. La estrategia apunta a fortalecer los corredores del Puma (503.288 hectáreas) y el del Jaguar (977.807 hectáreas).