Movilidad

Motos parqueadas en calles son problema difícil de solucionar

El 50 % de las calles de Medellín son ocupadas, de manera indebida, por los vehículos.

La primera entrevista que hice, a los 8 años de edad y con la ayuda de mi padre, fue al futbolista Andrés Escobar. Desde ese día no he dejado de hacer preguntas, ni de amar el periodismo. Soy egresado de la Universidad de Medellín.

19 de julio de 2017

Los parqueaderos de motos en vías públicas de Medellín, que lucen informales, invaden el espacio peatonal y obstaculizan el tránsito vehicular, no en todos los casos están prohibidos por la ley, aunque autoridades aceptan que es una mala práctica.

La problemática se presenta en el 50 % de las calles de la ciudad, reporta la Secretaría de Movilidad. En el Centro, Barrio Colombia, El Poblado y Laureles, algunos sectores son ocupados por vehículos que sus conductores dejan y particulares cobran por cuidarlos.

Según algunos concejales y urbanistas, la situación refleja la incultura y el incumplimiento de las normas. Exigen políticas claras para que la situación no se salga de control.

A Cristina Barrera se le hace tan difícil caminar como comprender que por la calle 14 con 52, cerca al zoológico Santa Fe, las motos invaden, a diario, el espacio peatonal.

“Es un parqueadero en la vía pública que manejan unos hombres. Incluso a los carros les es complejo circular y la gente casi no puede caminar por el lugar”, comenta.

No siempre hay sanciones

En Medellín y su área metropolitana, se estima, circulan 710.186 motos, de acuerdo con la Secretaría de Movilidad. El reporte oficial, además, da cuenta de que menos del 1,21 % de los motociclistas, 8.624, fueron sancionados por mal parqueo (ver recuadro).

Sin embargo, Mario Ramírez, subsecretario de Movilidad, advierte que en muchos de los parqueos masivos de motos en las calles no se efectúan comparendos, pues son sitios específicos en los que no es prohibido parquear, aunque sí es indebido.

“Hay vecinos que se molestan porque les parquean al frente, como es el caso del sector aledaño al zoológico, que presenta problemática de parqueo, pero no están estacionados en lugar prohibido. Lo mismo por Unicentro, están en permitido estacionar, aunque hay gran concentración de vehículos”, apuntó.

Para Ramírez, la solución a estas situaciones, indebidas— porque no es correcta la utilización del espacio público— está en la creación de parquímetros o Zonas de Estacionamiento Regulado (ZER).

Daniel Carvalho, concejal de Medellín y experto en el tema de urbanismo, considera que los parquímetros son una buena alternativa que debe extenderse, con rigurosidad, para las motos.

“Los ZER son una solución. Funcionan como una forma de desincentivar el uso de formas de transporte individuales, y donde se implementan se ha organizado”, apunta.

Carvalho recalca que en Medellín ese sistema genera 350 empleos formales y su recaudo apalanca proyectos de movilidad sostenible, como ciclorrutas, sistemas de transporte público y campañas cívicas. “En París (Francia), las celdas de parqueo dejan a la administración pública 300 millones de euros ($1.044.546.000.000 al cambio actual) al año”, acota.

Mirar el problema a fondo

La problemática por mal parqueo en Medellín se extiende a los carros y en lo que va del 2017, 12.518 conductores han sido sancionados.

Ramírez hace énfasis en la afectación que genera esa mala práctica y anota que, en ocasiones, hasta el 75 % de la vía es ocupado por los vehículos mal parqueados.

“El tiempo que pierde la ciudad por un vehículo mal estacionado es mucho y queremos recuperarle la calidad de vida a la gente haciendo controles, independientemente si son carros o motos”, dice.

Carvalho recalca que es necesario que en Medellín se realice un estudio detallado sobre la existencia de sitios legales de parqueo y zonas en las que sea necesario crearlos.

“Medellín, según el último Plan de Ordenamiento Territorial, tiene que redactar un plan de movilidad sostenible que tenga un capítulo dedicado a a la gestión del estacionamiento. Hoy no tenemos claro cuántos estacionamiento hay, cuáles son privados, cuáles públicos y qué sectores requieren una mejor oferta de parqueaderos”, explica.

El arquitecto experto en urbanismo Luis Fernando Arbeláez considera que, además de los parquímetros, el Municipio debe incentivar la construcción de parqueaderos para motocicletas en algunos sitios de Medellín.

“Tenemos que regular que los lugares de trabajo donde hay mucha afluencia de gente tengan estacionamientos para motocicletas, por reglamentación. Además se tienen que hacer esos estacionamientos públicos de manera ordenada, sistemática, con incentivos para su construcción, porque sino estos vehículos seguirán invadiendo el espacio”, anota.

Arbeláez explica que en la carrera 70 y las zonas rosas de El Poblado y Laureles se evidencia desorden por parqueo de motos en andenes y vías.

Costos de una mala práctica

La sanción por mal parqueo o por estacionar en sitios prohibidos tiene un valor de 368.865 pesos, pero si la moto es llevada a los patios, el costo se sube de acuerdo con la cantidad de días que pase allí: 58.548 pesos el arrastre (recorrido en grúa hasta el estacionamiento) y 11.662 la custodia (parqueadero).

“No es un capricho, sino que el mismo fenómeno de mal parqueo se convierte en un problema de congestión. En lugar de estar pidiendo más vías, deberíamos procurar que estén bien utilizadas”, asevera Carvalho.

Las autoridades aseguran que no bajan la guardia. Los sectores Ópera y Guayaquil, ambos en el Centro, están, permanentemente, en la mira de los agentes de tránsito que a diario hacen operativos allí.

“No solo hacemos operativos a través de agentes y con grúas, sino que hay vehículos de fotodetección para tomar infracciones y así controlar el parqueo”, añade Ramírez.

Pero si bien las normas tienen que hacerse cumplir y los cobros por parquear deben extenderse, como coinciden expertos y autoridades, las campañas para generar cultura del buen uso de la vía pública, también deben fortalecerse.