Presunto cabecilla de Bello murió infartado tras su traslado de cárcel
Egresado de la U.P.B. Periodista del Área de Investigaciones, especializado en temas de seguridad, crimen organizado y delincuencia local y transnacional.
Un ataque cardiaco, producido después de su traslado de cárcel, es la hipótesis principal sobre la muerte de Édgar Pérez Hernández, alias “el Oso”, presunto cabecilla criminal del municipio de Bello.
Su abogado Mauricio Morales le contó a EL COLOMBIANO que el deceso se produjo a la 1:00 de la madrugada de este lunes, en el hospital Federico Lleras Acosta de la ciudad de Ibagüé. Según su relato, “el Oso”, de 50 años de edad, padecía diabetes y tenía antecedentes de enfermedad cardíaca.
El rostro de Pérez Hernández figuraba en el cartel de los delincuentes más buscados de Bello. Las autoridades lo señalaban de ser el líder de la banda “Niquía Camacol”, una de las responsables por el incremento de los homicidios en la localidad desde febrero de 2019, por cuenta de un enfrentamiento contra sus enemigos de “Pachelly”.
El pasado 8 de diciembre fue capturado en una casa del barrio Camacol. La Dirección de Fiscalías contra la Criminalidad Organizada le imputó cargos por concierto para delinquir agravado, desplazamiento forzado y extorsión, los cuales él negó en el estrado. El Juzgado 19 Penal Municipal de Medellín, con funciones de control de garantías, le dictó medida de aseguramiento en la cárcel de Itagüí, mientras avanzaba el proceso.
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El domingo 5 de abril a la 5:00 a.m. le notificaron que sería trasladado a la prisión de Picaleña, en Ibagüé, a lo cual se opuso por su estado de salud y porque la citas de revisión las tenía programadas en Medellín. “Yo hablé con el Inpec, y me dijeron que era necesario el traslado disque porque había una posibilidad de fuga”, manifestó el abogado.
El viaje por tierra duró siete horas, hasta llegar a la capital tolimense. “Cuando lo vieron allá, estaba descompensado”, prosiguió Morales. A las 10:00 p.m. fue revisado en el área de sanidad de la cárcel, donde el médico determinó que estaba en riesgo de infarto, confirmó el Inpec a este diario.
Por eso fue remitido al hospital, donde horas más tarde falleció por infarto al miocardio, diagnóstico que deberá ser confirmado por Medicina Legal en la necropsia.
Este es la segunda muerte de un cabecilla de Bello encarcelado, que se registra en las últimas dos semanas. El pasado 21 de marzo acuchillaron a Alejandro Mazo Pulgarín, alias “Titi”, en el patio N°2 de la cárcel de Cómbita.
Estaba tras las rejas imputado por concierto para delinquir agravado, por ser el presunto jefe de la banda “Pachelly”, y compartía el mismo patio con sus enemigos.
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