Los letreros del ajusticiamiento criminal en Medellín y Urabá
Periodista especializado en temas de crimen organizado, terrorismo y conflicto armado. Creador del podcast Revelaciones del Bajo Mundo. También soy escritor y dramaturgo, autor de las obras teatrales “La Trilogía del Mal” y “Estallido”.
Ocho personas asesinadas en los últimos dos años en Medellín tenían un elemento en común: junto a sus cadáveres fueron hallados letreros que los tildaban de violadores o ladrones, lo que reflejaría un aparente móvil de ajusticiamiento por parte de los verdugos.
A solicitud de este diario, el Sistema de Información para la Seguridad y la Convivencia (Sisc), adscrito a la Secretaría de Seguridad, clasificó los eventos, tres de los cuales ocurrieron en 2015 y cinco en lo corrido del presente año.
La mayoría de víctimas son hombres, en el rango de edad de 19 a 28 años, y llama la atención que casi todos hayan sido abandonados en la zona occidental de la ciudad.
No existe un hilo conductor probado para estas muertes, aunque investigadores judiciales consultados por EL COLOMBIANO precisan que por lo general los perpetradores pertenecen a bandas de crimen organizado.
“Aquí hay dos modalidades: una son ajustes de cuentas entre combos; la otra, son casos de ajusticiamiento, en los que una comunidad o un particular se quejan de un delincuente ante los cabecillas del barrio, y estos actúan como ‘jueces criminales’, asesinando al sospechoso”, precisó un investigador, quien solicita la reserva de identidad por tratarse de casos en proceso de indagación.
Tampoco se descarta que se trate de pistas falsas que dejan los ilegales, para tratar de desviar el rumbo de las pesquisas policiales.
La modalidad de dejar letreros junto a una víctima data de los tiempos de La Violencia (1948-58), cuando ser de un partido político adverso generaba persecución y homicidios entre fanáticos liberales y conservadores. Luego siguió en el marco del conflicto armado entre las guerrillas y los paramilitares.
En la actualidad, las denominadas “narco sábanas” de las guerra entre los carteles mexicanos de la droga son la modalidad más conocida en el mundo. En la nación azteca, los perpetradores dejan mensajes manuscritos para intimidar a los enemigos, en pedazos de tela, cartones y cartulina, o suben videos de sus sanguinarias ejecuciones a internet.
Los casos
Esta es la relación de los eventos registrados en Medellín:
- Febrero 5 de 2015: en una calle de la cabecera corregimental de San Antonio de Prado hallaron el cadáver abaleado y apuñalado de un joven de 24 años, junto a un cartel que decía: “por violador”. Según las autoridades, tenía antecedentes por ataque contra servidor público y tráfico de drogas.
- Marzo 13 de 2015: en una vía del barrio Santa Cruz (comuna 2) fue perseguido y tiroteado un ciudadano que conducía un automóvil, el cual terminó estrellado contra un poste de energía. El conductor, de 41 años, falleció en el acto, y los homicidas arrojaron dentro del carro un cartel que decía “por sapo”. Tenía anotaciones por estafa, abuso de confianza y hurto.
- Julio 24 de 2015: dentro de una casa del barrio Llanaditas (comuna 8) encontraron el cuerpo sin vida de una mujer de 65 años, víctima de un fuerte golpe contundente y ahogamiento en un balde. En la pared de la habitación principal dejaron dos frases: “mensaje desde el limonar 2 era última de la familia que nos faltaba” (sic) y “con los pitufos no se juega”. La mujer había vivido antes en San Antonio de Prado (donde queda el barrio Limonar 2) y por problemas tuvo que irse.
- Abril 7 de 2016: en una calle del barrio Antonio Nariño (comuna 13) dejaron el cadáver abaleado de un muchacho de 25 años, con una hoja de block pegada en su pecho, que decía: “por rata HP”.
- Abril 27 de 2016: junto a una quebrada del barrio Juan XXIII La Quiebra (comuna 13), le dispararon en la cabeza a un joven de 25 años. Sobre su cuerpo dejaron un papel que decía “por ladrón”.
- Mayo 26 de 2016: en una vía pública del barrio Córdoba (comuna 7), un grupo delincuencial raptó a un joven de 19 años, lo asesinó a bala y le dejó un papel manuscrito que rezaba: “por rata”.
- Agosto 5 de 2016: en una calle del sector Cucaracho (comuna 7) abandonaron dos cadáveres masculinos, de 25 y 28 años, envueltos en costales. Cada uno de los finados tenía un papel manuscrito, que decían: “por robar motos y taxis” y “por robar repuestos de motos y taxis”.
Hechos en Urabá
Este año también se han presentado incidentes en la subregión de Urabá, ligados al tráfico ilegal de migrantes. El pasado 9 de agosto, en una playa localizada entre Capurganá y Acandí, dejaron el cuerpo de un pescador de 39 años, y sobre su espalda una cartulina que decía “por transportador de emigrantes”.
Y el 28 de enero del presente año, en el corregimiento El Dos del municipio de Turbo, le quitaron la vida a tiros a un joven de 20 años. En el asfalto, cuñada con su frente, dejaron otra cartulina con el letrero “muerte a los chilingueros”, refiriéndose a la denominación que le dan los lugareños a los traficantes de migrantes, también apodados “coyotes”.