Sin salida clara el arreglo de la Inferior con Balsos
Aunque ya se sabe qué pasó, cuál es la solución y cuánto vale, la Alcaldía no puede resolver el problema hasta no tener claro quién es responsable.
Periodista de la Universidad de la Sabana. Experto en temas de movilidad, transporte, infraestructura, desarrollo sostenible y gobierno. No hay historia pequeña.
Cuando se pensaba que la obra del paso a desnivel de la transversal Inferior con la loma de Los Balsos iba a concluir, después de nueve meses de atraso, dos contratistas y una falla estructural, otro lío volvió a parar la obra: el inicio de la reparación del muro, la cual no se ha podido adelantar porque no hay claridad en quiénes tuvieron la culpa.
La ejecución de esta obra, uno de los 24 proyectos de valorización de El Poblado, se detuvo al 95 por ciento por el enredo jurídico que hay detrás del arreglo que sugirió una consultoría externa.
“El tiempo de las ocho semanas para el arreglo empezaba a correr una vez se encontrara el camino jurídico, ¿por qué? Porque la solución fue lo primero que le pedimos a la consultoría, la cual estuvo dividida en dos partes: la primera, encontrar la solución, y la segunda, conocer los responsables. ¿Qué pasó? La solución, al momento de cuantificarse, excedía el valor de la adición que se le podía hacer al contrato, eso cerraba un camino jurídico que era levantar la suspensión que hay con Gisaico, hacer la adición hasta el 50 por ciento y que ellos ejecutaran la solución; sin embargo, a los 15 días llegó el otro informe que exponía las causas y este involucraba al segundo contratista”, le explicó a EL COLOMBIANO César Augusto Giraldo, director de Fonvalmed.
En este sentido, aunque el informe de la Universidad de Medellín es muy ambiguo, pero concluía que Gisaico (el segundo contratista) también tuvo parte de la responsabilidad, Fonvalmed está analizando si resuelve o no el problema con ellos. Esto que jurídicamente no ha permitido que se le responda a la comunidad en los tiempos previstos.
“Estamos analizando opciones, una es la posibilidad de hacer un convenio interadministrativo con otra entidad que tenga mejores facilidades de contratar, porque si nosotros saliéramos a licitar la solución por aparte, nos demoraríamos otros dos o tres meses solo para adjudicar; por eso estamos buscando si a través de la Empresa de Desarrollo Urbano (EDU), que tiene un régimen de contratación más flexible, a ver si lo hacemos más rápido. Lo otro es que, si con las aclaraciones que le hemos pedido al informe de la Universidad de Medellín son más concluyentes, podemos tomar una decisión”, argumentó Giraldo.
Como se trata de una falla de obra, Fonvalmed tendría que iniciar los procesos de incumplimientos que pueden terminar en demandas jurídicas y acciones contractuales.
De acuerdo con el estudio de la Universidad de Medellín —que costó 208 millones de pesos y que informa qué falló y cómo se soluciona— la reparación del muro requiere una inversión de 1.700 millones de pesos; con esos recursos se instalaría un sistema de vigas y columnas. El plazo contractual con Gisaico se vence la primera semana de agosto, pero este está suspendido desde hace unos meses.
Cansados
Los vecinos de la obra, que han tenido que aguantar incomodidades y promesas incumplidas, ya están cansados de todo lo que ha sucedido.
“Estamos desesperados con las demoras”, comentó María Mejía residente de la unidad Princesa Plaza, ubicada a escasos metros de la construcción.
Aunque la Administración Municipal ha manifestado su interés de llegar a un acuerdo con los afectados, hay propietarios que no creen y quieren interponer una acción de reparación directa.