En 2014 se cuentan 97.453 desplazados forzadamente
La Unidad Nacional de Víctimas tiene registrados en su base de datos estos casos. En el Chocó hay 6.269 personas afectadas.
Editor Área de Paz y Derechos Humanos. Periodista de la Universidad de Antioquia con estudios en antropología y literatura.
Mientras avanzan los diálogos de paz hacia un eventual acuerdo de desescalamiento del conflicto armado, los desplazamientos masivos de campesinos, indígenas y de comunidades afro no paran por las hostilidades de todos los grupos armados.
La Unidad Nacional de Víctimas ya registra 101.491 afectados por el conflicto en lo corrido de este año en todo el país, principalmente por el desplazamiento forzado, (97.453 personas expulsadas), siendo el Pacífico una de las regiones con más casos.
Y es que en el año ya son nueve los desplazamientos masivos en el Pacífico. Alrededor de dos mil personas han salido corriendo de sus territorios, huyéndoles a los combates de las Farc, el Eln y “los Rastrojos”.
Según la Defensoría del Pueblo, la población más afectada —por los desplazamientos masivos— es la que vive en las riberas del río San Juan, en el sur del Chocó, y en el noroccidente del Valle del Cauca.
El mismo defensor Jorge Armando Otálora denunció que el fin de semana pasado llegaron alrededor de 430 personas a Buenaventura, 93 familias, desplazadas del sector Agua Clara y de Balsalito, en el Litoral San Juan, Chocó, por los enfrentamientos del ELN con las bacrim.
Los campesinos se encuentran en el Coliseo Cristal del puerto y le aseguraron a la Defensoría del Pueblo que padecen problemas de alimentación, salud y que no tienen agua potable.
Desplazamiento masivo
Según Inteligencia Militar, la zona del Litoral San Juan y Buenaventura está en disputa por parte de las Farc y el ELN con las bandas criminales. A esto se le suma que hace 15 días el Eln impuso un paro armado en el Medio San Juan que paralizó el transporte por el río Atrato y sus afluentes. Incluso, en el primer semestre del año se registraron otros desplazamientos masivos en el Alto Baudó que tuvieron que ser atendidos con urgencia por el Comité Internacional de la Cruz Roja, Cicr.
Toneladas de alimentos tuvo que trasladar el organismo humanitario hasta este municipio tras los combates entre el ELN y “los Rastrojos”, que se presentaron en las riberas del río Dubaza. Fueron 17 comunidades indígenas, 2.800 personas, que se vieron obligadas a refugiarse en el corregimiento de Santa Catalina de Catrú.
Tal y como lo reseña el Ejército, en el Chocó se mueven los frentes 57, 34 y el Aurelio Rodríguez de las Farc. También los frentes Resistencia Cimarrón y Manuel Hernández “el Boche” del ELN, y “los Rastrojos” y “los Urabeños”. A esto se le suma la expansión desaforada de la minería ilegal y la entrada de armas y la salida de coca por el mar Pacífico. Situación que agrava el desplazamiento masivo. La Unidad Nacional de Víctimas también tiene el reporte de que 6.269 personas fueron expulsados de sus territorios en el Chocó hasta noviembre de este año.
Confinamiento y miedo
El Defensor Jorge Armando Otálora, quien estuvo en Buenaventura el fin de semana, le pidió al Gobierno una atención humanitaria inmediata para las familias que están llegando al puerto por las hostilidades en el Litoral del San Juan.
También pidió especial atención, ya que en la zona baja del río San Juan, entre Buenaventura y el municipio de El Litoral del San Juan, los grupos armados obligan a 19 comunidades a permanecer en sus territorios sin poder moverse, cazar, y transportar alimentos.
De acuerdo con el Defensor del Pueblo, las 19 comunidades confinadas son: “tres comunidades indígenas de la zona rural de Buenaventura, Puerto Pizarro y Aguas Claras. También 16 afrocolombianas e indígenas confinadas del municipio de El Litoral del San Juan, Pichimá Quebrada, Togoromá Quebrada, Loma Alta, Unión Balsalito, Unión San Juan, Puerto Guadualito, Nuevo Pitalito, Taponalito, Papayo, Las Palmas, Borrojón, San Bernardo, Guarataco, Buenvista, Tío Cirilio y Naldes”.