¿Gobierno y Eln se encaminan otra vez a una mesa de negociación?
Reactivar un diálogo cerrado hace 14 meses es la tarea de los dos nuevos gestores de paz del presidente Duque. Para pactar una agenda, la guerrilla debe liberar a los secuestrados.
Amo el periodismo, y más si se hace a pie. Me encantan los perros, y me dejo envolver por una buena historia. Egresado de la Universidad de Antioquia.
El cruce de mensajes encriptados en las últimas dos semanas ha dejado una misiva clara: o el Gobierno y el Eln recorren el camino para sentarse a una nueva negociación, o por lo menos se adelantan contactos para establecer un diálogo exploratorio que lleve a concertar una nueva agenda con esta guerrilla.
La última puntada la dio la Ministra de Relaciones Exteriores, Claudia Blum, en su intervención en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas el pasado martes cuando afirmó que, para llegar a conversaciones, “el ELN debe demostrar su compromiso con la paz a través de acciones concretas como la liberación de ciudadanos secuestrados y el cese de cualquier acto criminal”.
El alto comisionado para la Paz, Miguel Ceballos, también le envió un mensaje contundente al Eln y su cúpula por el rechazo de Carlos Arturo Velandia, conocido como Felipe Torres, y Gerardo Antonio Bermúdez o Francisco Galán, ambos excombatientes del Eln designados como promotores de paz y encargados de los acercamientos con esta guerrilla. “No es momento de cerrar las puertas, es momento de abrirlas”, aseveró Ceballos, sin embargo, el alto comisionado dijo a EL COLOMBIANO que no hay acercamientos.
El mensaje del Eln
La designación de Felipe Torres y Francisco Galán como promotores de paz es la de buscar una agenda común que lleve a un nuevo diálogo, cerrado desde el 17 de enero de 2019, cuando el grupo guerrillero detonó un vehículo cargado de explosivos en la escuela de cadetes de la Policía, en Bogotá.
Bajo ese contexto, Francisco Galán expresó que él y su compañero no solo son gestores entre el Gobierno y el Eln, también con los otros grupos que operan en el territorio colombiano, “y así como han establecido alianzas para las ganancias, ¿por qué no establecer consensos para la paz?”.
Conocida la posición del Gobierno, el Eln también envió un mensaje conocido por este diario: desconoce a Torres y a Galán como voceros y este tipo de decisiones “cierra las puertas a una posible interlocución con los voceros legítimos del ELN”.
Las otras señales
Más allá de los mensajes, analistas del conflicto armado ven otras dos señales que califican como inequívocas de un posible acercamiento entre el Gobierno y el Eln.
Una de ellas es, para el analista del conflicto armado, Juan Carlos Ortega, la reducción de solicitudes de extradición del gobierno colombiano a Cuba por los jefes que siguen en ese país después de la ruptura. “En el 2019, en los últimos seis meses, el Gobierno solicitó en cuatro ocasiones la extradición de los negociadores. En 2020 la última fue en enero. Han pasado tres meses y no han solicitado a nadie más”, manifestó Ortega.
Además, agrega el analista, el Eln ha dejado en libertad, a cuenta gotas, a algunos de los secuestrados y declaró un cese el fuego desde el 1 de abril.
No obstante, para Luis Eduardo Celis, especialista en análisis de conflictos armados, las señales de una negociación no son tan claras.
“Desafortunadamente el presidente Iván Duque no tiene ningún interés en una negociación con el Eln, y el Eln no tiene ningún afán en un proceso de diálogo y tampoco ha madurado una decisión firme en este sentido, lo que tenemos es sufrimiento para las comunidades donde tienen presencia”, aseveró Celis.
Esas comunidades son las mismas que hoy piden un respiro y que, a través de voceros como el obispo de Quibdó, monseñor Juan Carlos Barreto, piden a los armados dejarlos por fuera de la guerra.