Colombia

Keralty contraataca y denunciará a Petro por calumnias en instancias internacionales: reclama por “campaña sistemática de desinformación”

Tras ser tildado de “criminal” por el mandatario en una alocución televisada, el presidente de Keralty, Joseba Grajales, anunció que lo denunciará ante instancias nacionales e internacionales por calumnia y desinformación. Afirmó que no permitirá que se mancille la reputación del grupo ni de sus colaboradores.

16 de julio de 2025

Tras la controvertida alocución que ofreció en la noche de este martes el presidente Gustavo Petro, en la que, entre otras, arremetió contra la empresa Keralty –conglomerado empresarial del que hace parte la EPS Sanitas–, este miércoles el presidente de la organización, Joseba Grajales, anunció que denunciará al jefe de Estado en instancias nacionales e internacionales.

Durante el Consejo de Ministros televisado, el primer mandatario reclamó que las EPS son responsables de un robo de los recursos del sistema de salud porque su Gobierno, dijo, es el que más plata le ha dado al sector, en comparación con sus antecesores. En esa línea, sostuvo que “el dueño de Keralty es criminal en Colombia y debe irse”.

“Las no intervenidas en un año duplicaron la deuda con clínicas y hospitales y otros acreedores. Esto es un robo. ¿Dónde está la fiscal? Es un robo mayor que el robo del oro de los españoles. Y se robaron la plata que nosotros mismo dimos. Esto mata niños en masa en Colombia, que es un crimen de lesa humanidad. ¿Por qué no investigan? ¿Les da miedo porque son ricos? El político que reciba un peso de Keralty es un criminal. Y el dueño de Keralty es criminal en Colombia y debe irse”, señaló el mandatario.

Frente a ello, el presidente del grupo emitió una carta dirigida a sus colaboradores y a la opinión pública en la que recuerda que un reciente fallo de la Corte Constitucional declaró ilegal la intervención a la EPS Sanitas, lo que –dijo– “marca un hito claro en la defensa de la legalidad, de los principios y de nuestro propósito”.

Frente a esa verdad jurídica, Grajales alegó que las reacciones del presidente Gustavo Petro y algunos de sus colaboradores, “recrudecidas en intervenciones televisivas como las de ayer y consistentes con una narrativa sostenida durante más de tres años, no solo constituyen un atropello a las instituciones, sino una campaña sistemática de desinformación, plagada de mentiras, calumnias e insultos”.

Según el directivo, este tipo de narrativas buscan “socavar, sin fundamento alguno, la legitimidad de nuestro trabajo, el valor de nuestra historia y la reputación de quienes lideramos con responsabilidad y compromiso”.

En esa línea, reveló que dio instrucciones a su equipo legal “para actuar con firmeza y claridad”, por lo que denunciarán ante los juzgados nacionales e internacionales al presidente Gustavo Petro, así como a los miembros de su equipo de gobierno “que han colaborado en la difusión de estas mentiras, y a cualquier persona o entidad —pública o privada— que intente dañar, por acción u omisión, la imagen de este grupo, de sus instituciones o de las personas que lo conformamos”.

Al ratificar que cree en la justicia, el directivo fue enfático en advertir que no van a permitir que se “mancille con impunidad” el nombre de sus colaboradores.

“Les digo con orgullo: sigamos en pie. Nuestra mejor defensa está en los millones de personas que confían en nosotros, en cada comunidad que cuidamos, en cada innovación que nace desde nuestro compromiso con la salud y el bienestar. El ruido de la mentira no debe desviar nuestro rumbo. La historia siempre acaba por separar al justo del oportunista, al ético del manipulador”, precisó.

Inclusive, en un apartado Grajales indicó que la honestidad, la honradez, la ejemplaridad y la trayectoria tanto de los colaboradores como de una organización “no las conceden los resentidos, ni pueden ser cuestionadas por quienes habitan en la mentira o se rodean de figuras con pasados oscuros y conductas que no son modelo para nadie”.

Incluso citó a Platón señalando que “el verdadero líder debe buscar el bien común, no su poder personal”; a Aristóteles, en el sentido de que “el carácter se forja en los actos repetidos”; a Séneca, precisando que la integridad “es un escudo inquebrantable frente al insulto”, y a Immanuel Kant, en el sentido de que “la dignidad no se negocia, porque es el valor intrínseco del ser humano que actúa desde la verdad”.