Natalia Rincón, primera mujer artillera de las Fuerzas Armadas
También fue la primera en realizar mantenimiento a diferentes helicóteros de la Fuerza Aérea.
Periodista. Magíster en Comunicación de la Defensa y los Conflictos Armados de la Universidad Complutense de Madrid
A sus 27 años, Natalia Karely Rincón Mora, se da el lujo de decir que ha cumplido dos de las más importantes metas en su vida profesional: ser la primera mujer aerotécnica en la Fuerza Aérea Colombiana, FAC, como también convertirse en la única artillera en las Fuerzas Armadas.
En menos de cuatro años de servicio, esta mujer, nacida en el municipio de Toledo, Norte de Santander, ya tiene la capacidad de ofrecer mantenimiento a diferentes aeronaves como los helicópteros Bell Huey 212 o el UH-1H y manipular el armamento como las ametralladoras Gau 19, Gau 17, Mk19 y M60, calibres .50, 7.62 y 40 milímetros.
En estos momentos está asignada en la base del Comando Aéreo de Combate número cuatro, con sede en Melgar, Tolima, en donde también se encuentra su esposo, quien al igual que ella, hace parte de la Fuerza Aérea y se ha convertido en una pieza fundamental para poder lograr los objetivos hasta ahora alcanzados.
Natalia Karely Rincón Mora habló con EL COLOMBIANO sobre su experiencia y la responsabilidad que tiene con su nuevo cargo: la primera artillero de un helicóptero de la Fuerza Aérea Colombiana.
¿Cómo fue ese proceso para llegar a lo que es ahora?
“Cuando yo comencé a estudiar la carrera no recibían mujeres para mantenimiento en la fuerza aérea, las convocatorias siempre decían que eran para personal masculino. Pero cuando eso cambió yo estuve en la primera convocatoria, me recibieron, estuve en la escuela siete meses y me gradué como la primera aerotécnica de la Fuerza Aérea”.
¿A quien le consultó primero sobre sus sueños?
“Yo le dije a mis papás que quería ser la primera mujer de mantenimiento que tuviera la Fuerza Aérea, yo sabía que no había ninguna, y pues gracias a dios las cosas se dieron, fui la primera y ahora también la primera artillero”.
¿Cuál fue la reacción de ellos cuando les contó?
“Felices, súper contentos, orgullosos, no solo por pertenecer a esta institución, también por lo que he logrado”.
¿Sintió siempre el apoyo de la Fuerza Aérea?
“La institución siempre me ha apoyado mucho, siempre hay voces de aliento, se que es una responsabilidad muy grande y más por ser la primera en llegar a donde estoy, entonces puedo ser el ejemplo de otras mujeres que quieran lo mismo”.
¿Ve cercana la posibilidad de que una aeronave de la FAC sea tripulada solo por mujeres?
“Falta poco, ya las mujeres podemos demostrar de lo que somos capaces, y no creo que esté muy lejos que una aeronave de la fuerza aérea esté tripulada solo por mujeres, ya tenemos la primera piloto de un Black Hawk, ya tenemos aerotécnicas y ahora artilleros”.
Como artillero de una aeronave le toca responder por la seguridad del aparato y del personal en tierra, ¿mucha responsabilidad?
“Tengo plena consciencia de que es una responsabilidad muy grande, porque yo trabajo para salvaguardar la soberanía nacional, también se que tengo que estar muy pendiente de los movimientos de la aeronave, uno hace parte de la tripulación, entonces la concentración es vital para nuestra seguridad y la del personal en tierra”.
¿Ya tuvo su primera experiencia en combate?
“Aunque si me han tocado misiones, no he tenido que disparar, hasta el momento solo en entrenamientos”
¿Qué le falta a su carrera?
“Aún falta, los próximos pasos son llegar a ser tripulante de la aeronave, inspectora y así vamos poco a poco, puedo llegar, ya estoy dando los pasos”.
¿Otras mujeres de la fuerza le piden consejos?
“Yo soy la más antigua en cuanto a helicópteros, tengo varias compañeras que recién ingresaron y están haciendo los pinitos, ellas sabes que pueden contar con mi experiencia, para que logren lo que buscan, lo que quieren”.
¿Cómo la tratan sus compañeros?
“Los hombres siempre han estado ahí, no falta el apoyo, acá no importa que yo sea mujer, nunca me han dicho usted no puede por ser mujer, eso me ayudó mucho”.
¿No le da temor que en medio de un combate sea usted uno de los principales blancos?
“No, miedo no, yo confío en la voluntad de dios, y a el le encomiendo mis acciones, por eso no siento miedo”.