Cuotas en las listas: origen de peleas en el petrismo
Petro priorizó las alianzas políticas en su lista al Senado e incumplió sus promesas a las “fuerzas sociales”.
Periodista, apasionado por la historia, la geopolítica y los documentales. Hago preguntas desde que tengo uso de razón. Egresado de la Universidad Eafit.
Ni tan democrática ni tan incluyente como lo pintaron. Así resultó ser la conformación de la lista al Senado de la coalición de Gustavo Petro, el Pacto Histórico. El tema se convirtió en un dolor de cabeza para el senador de la Colombia Humana, por cuenta de las peleas internas que generó su aparente inclinación a pagar cuotas políticas, lo que puso en entredicho la renovación que promete esa colectividad.
Al tratarse de una lista cerrada –que implica que la atribución de curules obtenidas se haga siguiendo el orden establecido–, la entrega de los primeros cupos se convirtió en un tema espinoso y le costó a Petro molestias, críticas y hasta renuncias de representantes de diferentes sectores sociales en su coalición.
El escepticismo al interior del Pacto Histórico fue tal que quienes obtuvieron los primeros puestos de la lista se atornillaron, volviéndose inamovibles, pues estos fueron entregados estratégicamente por Petro a sus aliados. Así, el senador le dio más prioridad a las organizaciones políticas que a las “fuerzas sociales y ciudadanas” a las que en febrero pasado les prometió que conformaría una lista diversa.
Priorizó intereses políticos
El malestar por la conformación de la lista lo ventiló Francia Márquez, quien aseguró que Petro “decidió honrar sus acuerdos con aliados políticos” al entregarle el puesto 11 a la cuota del alcalde Daniel Quintero, el cuestionado exconcejal Alex Flórez, por encima de sus dos aspirantes afrodescendientes: Carlos Alfonso Rosero o María Vicenta Moreno, quienes renunciaron al Pacto Histórico por la limitada posibilidad de conseguir curul al ocupar las casillas 27 y 30.
Esta situación resultó ser toda una paradoja para el líder de esa coalición, pues el 22 de febrero aseguró que se encargaría de que las listas a Senado y Cámara fueran una “expresión genuina de nuestra sociedad diversa que cambien el Congreso para poner la ley al servicio de las mayorías y el bien común. Estas listas tendrán mayoría femenina y cuotas afro e indígenas”. Sin embargo, la realidad fue otra.
En los primeros 11 puestos de la lista al Senado, Petro ubicó a sus aliados políticos estratégicos. Entre ellos hay seis congresistas; una exsenadora; la presidenta de un partido indígena; dos cuotas políticas; y una activista que ha sido criticada en redes sociales desde el martes por autorreconocerse como afro para calmar los ánimos por la amenaza de separación de Francia Márquez.
Estrategia electoral
Con el único fin de amarrar amplio poder electoral, Petro puso como cabeza de lista a su principal aliado y escudero, el senador Gustavo Bolívar (116.505 votos en 2018), quien reconoció que con lista abierta podrían conseguir menos curules. “Muchas de estas personas (los 30 primeros) no saldrían elegidas en lista abierta, donde prima el dinero”, dijo.
Con ese objetivo de votos, también lograron puestos privilegiados (ver Infografía) la representante a la Cámara María José Pizarro (77.800 votos en 2018), y los senadores Alexánder López (84.229 votos en 2018), Aída Avella (57.175 votos en 2018), Roy Barreras (110.358 votos en 2018) e Iván Cepeda (77.842 votos en 2018).
Entre estos congresistas el más cuestionado ha sido Barreras, pues además de que fue expulsado del Partido de la U, en los últimos 20 años apoyó a Álvaro Uribe, luego a Juan Manuel Santos y ahora aterrizó en el petrismo.
La lista la completan la presidenta del partido político indígena Mais, Martha Peralta; la exsenadora Piedad Córdoba (67.438 votos en 2010); dos cuotas políticas: Pedro Flórez (el de Armando Benedetti) y Alex Flórez (el de Daniel Quintero); e Isabel Zuleta, la activista que fue cuestionada a finales de noviembre por aparecer en una foto con Luis Pérez Gutiérrez, quien ha intentado aterrizar en el Pacto Histórico, generando amplia resistencia.
Estos 11 primeros en la lista son quienes tienen más opciones de llegar al Senado, particularmente por interés de Petro, quien ha tratado de demarcarse sin ningún éxito (ver Paréntesis) de la entrega prioritaria de sus avales.
La confirmación de estos inamovibles ha sido la principal causa de discusión en el Pacto Histórico en las últimas semanas y con la falta de las “cuotas afro e indígenas” prometidas la renovación quedó en segundo plano