Pulso de Fasecolda y Camacol por “póliza antiSpace”
La ponencia del proyecto de Ley C111/14 para atender eventos como el del edificio Space debe presentarse este año o se volverá a hundir en el Congreso.
La discusión de la iniciativa que busca establecer un mecanismo que proteja a las víctimas de catástrofes como la del edificio Space, ocurrida en octubre del año pasado en Medellín, tiene enfrentados a los aseguradores y a los constructores, mientras el Gobierno, gestor de la propuesta, tiró la pelota al campo del Congreso para que sea allí donde se defina si se creará un seguro o un fondo público, para responder por este tipo de contingencias.
Este diario dialogó con los voceros de Fasecolda y Camacol, gremios asegurador y constructor, para conocer sus posiciones acerca de la iniciativa que deben tramitar los congresistas, evitando un nuevo fracaso como el del primer semestre de este año cuando las elecciones presidenciales, entre otros asuntos, hundieron el proyecto.
Jorge Humberto Botero, presidente de Fasecolda, reveló que independiente de lo que pase en el Congreso, al mercado asegurador llegará la póliza el próximo año.
Está pesimista, ¿volverá a hundirse la propuesta?
“Esta iniciativa está a punto de fracasar si no hay presión ciudadana y esa presión tiene que ejercerse sobre el Gobierno que, por razones incomprensibles, ha desertado de cualquier liderazgo sobre una iniciativa que es suya, al trasladarle al Congreso la responsabilidad de definir si se crea o no la póliza aseguradora”.
¿Hasta dónde llevará Fasecolda el pulso que sostiene con Camacol?
“Estamos dispuestos a buscar fórmulas de entendimiento de cara al Congreso que ahora tiene el liderazgo y tenemos diálogo abierto con Camacol, pero en el fondo si no encuentro un ambiente adecuado cojo la carpeta y lo dejo de lado, porque desde el punto de vista de negocios esto ya no le interesa al sector asegurador”.
Entonces, ¿qué seguirá?
“El escándalo que generó Space va a determinar que a comienzos del año entrante haya un renglón de negocios muy importante en el mercado voluntario de seguros, inducido por los bancos y comprado por los constructores para proteger a los bancos y en el remanente, si lo hubiera, a los compradores de vivienda. Desde el punto de vista de negocio, ya el lanzamiento está dado por el caso Space. Seguros habrá, ingresos para las compañías habrá y a mí eso ha dejado de interesarme, me interesan los efectos sociales de la ausencia de regulación con relación a muchas víctimas que puedan darse en el país”.
Los constructores dicen que la póliza no es preventiva y que encarece la edificación...
“La póliza es preventiva porque la función primera del seguro es prevenir los riesgos y por eso cuando un asegurador le otorga una cobertura de incendio a un empresario, lo primero que hace es verificar el sistema de extinción de incendios. Igual ocurre con alguien que va a comprar una póliza de salud, antes tiene que ir donde el médico y por eso el costo de las pólizas en el mercado voluntario de seguros de salud es más alta para los obesos que para quienes están en el peso normal. Ahora, ¿qué tiene un costo?, pues claro que lo tiene. Camacol da unas cifras del costo de las pólizas para desprestigiar el mecanismo del seguro, sobre la base de que las aseguradoras se ganan un dinero. Yo no pregunto cuánto se ganan los constructores. Lo que importa no es si los constructores o aseguradores hacen un negocio, lo importante es si haciéndolo le agregamos valor social al producto que entregamos”.
Camacol sostiene que se acabarían las pequeñas firmas constructoras...
“Los constructores no suelen tener el patrimonio para responder por los daños derivados de los riesgos inherentes a la construcción, por eso se requiere una ley que haga obligatorio un esquema de protección de esos terceros. Lo que ocurre es que buena parte de la construcción de vivienda la hacen compañías que se crean para el desarrollo de un proyecto específico y una vez el proyecto se vende liquidan la compañía. Por eso en los primeros cinco años de vida de las empresas de construcción el 46 por ciento desaparece, entonces no hay patrimonios de respaldo. No los hay ni los hubo en el caso de Space y nos los hay, casi, en ningún otro caso”.
La póliza, ¿ya está diseñada por las aseguradoras?
“Algunas empresas la tendrán lista para aplicarla en función de la Ley o en función voluntaria a pedido de los bancos que otorgan créditos hipotecarios y que están expuestos, como lo mostró el caso de Space, a que los inmuebles que soportan las garantías se vuelvan polvo, entonces el seguro sobre bases voluntarias para proteger al acreedor hipotecario se va a desarrollar. Yo he dicho, bueno por lo menos protejan, ante la resistencia del sector de la construcción a la póliza, a las terceras víctimas, pero lo ideal sería otra cosa”.
Usted le ha pedido al ministro de la Presidencia, Néstor Humberto Martínez, una cita para exponerle sus argumentos, ¿lo recibirá pronto?
“Él es una persona muy ocupada y yo seguramente no califico para aspirar a una cita pronta”.
La presidenta de Camacol, Sandra Forero, no admite que haya un pulso con el sector asegurador, aboga por una ley que en el futuro evite episodios como el que afrontan los afectados por el derrumbe de Space, aunque reconoce que la póliza, que defiende Fasecolda, tiene dificultades.
¿El pulso con Fasecolda hará que este proyecto se vuelva a hundir?
“No hay un pulso. La idea es sacar una ley que sirva para lo que realmente enfrentamos, que fue lo ocurrido en Space y trascender eso y no legislar en caliente. Si hay cosas que se puedan fortalecer, aprovechemos el proyecto y su discusión. El pulso es seguramente porque nosotros como constructores tenemos que mirar toda la iniciativa y no enfocarnos únicamente en si va o no la póliza, el centro debe estar en qué pasó y que no vuelva a ocurrir. El problema para los compradores fue terrible, pero ningún constructor construye para que eso suceda, entonces hay que buscar cada vez la excelencia y vamos en ese camino”.
¿Qué rescata de la nueva iniciativa?
“El proyecto tiene cosas valiosas, pero hay un título como el del tema técnico que se puede mejorar así como el aspecto de los curadores, una figura que no debe acabarse o satanizarse. También da la alternativa de cuál es el mecanismo para proteger o resarcir los daños patrimoniales de un eventual comprador a un tercero, llámese póliza o fondo. Hemos planteado la dificultad de tener una póliza de seguros obligatoria, sin tener claras las condiciones porque hay un desequilibrio de negociación entre un asegurador que puede o no otorgarla y un constructor que está obligado a tenerla”.
Otras desventajas...
“La póliza no es preventiva, eso es claro, y se hace efectiva cuando eventualmente un edificio se cae y lo que nos interesa es que no se caigan las construcciones y por eso nos preocupamos mucho en el capítulo de la prevención. Lo otro es que la póliza, del proyecto de ley del año pasado, era muy general lo que dificulta la negociación de un constructor pequeño, debido a que las aseguradoras le exigirían primas muy altas y eso hace ver a las empresas pequeñas por fuera del mercado y no quisiera eso”.
¿En cuánto encarece la póliza la edificación de un inmueble?
“Claramente cualquier cosa que se le agregue al proceso de construcción encarece y por eso la preocupación. Un constructor pequeño no puede pagar una póliza cara y en otros casos el que la paga la traslada al precio de la vivienda”.
Las proyecciones de los aseguradores muestran que la póliza tendría un impacto de aproximadamente 2.500 pesos, mensuales...
“No sé cómo es ese cálculo de Fasecolda y nosotros no lo hemos hecho porque no existe la póliza en el mercado y tampoco nos han dicho cuánto vale la prima. Lo único que nos han dicho es que puede tener un impacto del 1,5 por ciento sobre el precio de venta. Con las ventas de vivienda del año pasado por 30 billones de pesos, si les aplicamos el 1,5 por ciento, suman 450.000 millones de pesos los que se van directo al mercado asegurador y en eso hay un desequilibrio”.
¿La póliza es el centro del forcejeo con Fasecolda?
“Yo no tengo un forcejeo con ellos, lo que estoy diciendo es que los constructores ya están haciendo muchas de las cosas que están en la ley, como la doble revisión de diseños, la supervisión técnica externa y permanente y lo que nos interesa es fortalecer el proceso constructivo”.
¿Qué tan saludable es que los congresistas definan si se crea el seguro o el fondo público?
“Así lo planteó el Gobierno y por eso es válida la discusión”.
¿Space frenó la dinámica del negocio?
“No. Nosotros medimos los efectos y hubo un impacto focalizado en Medellín, pero muy poco y ya se activó el sector, lo que resulta importante es que hay confianza permanente de los compradores”.