Suspenden privilegios en pabellón de La Picota donde hacían asados
Ante las denuncias de la senadora Claudia López, sobre un supuesto acto de proselitismo desde la cárcel La Picota de Bogotá, el director del Inpec, general Jorge Ramírez, suspendió los servicios de Internet, telefonía y televisión por cable a los internos del pabellón ERE (Establecimiento de Reclusión Especial), conocido como el patio de los parapolíticos.
Según las denuncias de la senadora del partido Alianza Verde, el exalcalde de Cúcuta, Ramiro Suárez Corzo, quien cumple una pena de 27 años por el homicidio de su exasesor Enrique Flórez, estaría realizando actividades proselitistas desde su lugar de reclusión a través de Skype, coordinando la campaña política del candidato de Opción Ciudadana César Rojas.
La decisión se tomó el pasado viernes, tras una reunión entre el Inpec y el ministro de Justicia, Yesid Reyes, donde se analizaron los alcances de la denuncia de la senadora sobre un nuevo escándalo de parapolíticos, y se le pidió a López entregar más evidencias sobre sus denuncias, mientras se toman las medidas preventivas del caso.
Estas medidas causaron malestar entre los internos del pabellón en La Picota, pues allí existen algunos patios que tienen el beneficio de uso de Internet desde los puntos de Vive Digital, aprobados por el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, desde donde los internos pueden tomar capacitaciones universitarias.
Según algunas versiones, los internos del patio de los parapolíticos no son los únicos que tienen acceso a Internet, sino también los guerrilleros y paramilitares postulados a la Ley de Justicia y Paz, que cuentan con teléfono tarjetero y modem.
Este pabellón de la cárcel La Picota ha estado en el ojo de las autoridades por los múltiples escándalos que de allí han salido, pues se ha denunciado en varias ocasiones que estos internos tienen la posibilidad de recibir visitas entre semana, contar con cocinero privado y también la posibilidad de salir a citas médicas y odontológicas.
Los casos más sonados
El más reciente caso se dio el pasado 20 de septiembre cuando Carlos Agustín Peralta fue sorprendido intentando ingresar ocho botellas de whisky, durante una visita a la cárcel La Picota. El licor tenía como destino la celda de Diego Luis Parodi, recluido en el pabellón de funcionarios públicos (R2).
En la primera semana de este mismo mes Tomás Jaramillo Botero y Juan Carlos Ortiz, detenidos por el escándalo de Interbolsa, fueron sorprendidos por los grupos especiales del Inpec en pleno asado y bebiendo whisky en los prados del pabellón, como parte de la despedida al exconcejal Juan José Rodríguez, preso por el escándalo del ‘carrusel’ de la contratación en Bogotá.
Por esos mismos días fue hallado en una de las habitaciones de los guardias del centro penitenciario 2.275 gramos de marihuana, la cual hasta el momento es materia de investigación por parte de la Fiscalía General de la Nación.
En julio, el Inpec reveló el insólito caso en el que Emilio Tapia contrató guardianes de la cárcel La Picota de Bogotá y a internos para que le remodelaran la celda, por lo cual se abrió una investigación que involucró a varios funcionarios del centro penitenciario.
Todos estos hallazgos han salido a la luz pública luego del incremento de los operativos de registro y control, con los cuales el Inpec pretende reforzar sus controles y combatir la corrupción que se presenta en el Centro Carcelario.