Colombia

Uribe y la U se unen para regular cigarrillo electrónico

La Comisión Séptima del Senado aprobó aplicarle las restricciones del cigarrillo normal a este dispositivo.

Reportero. Creo, como Rainer Werner Fassbinder , que “ lo que no podemos cambiar, debemos al menos describirlo”.

08 de junio de 2016

Colombia se sumó a los países que buscan una regulación para la venta y uso del cigarrillo electrónico, dispositivo que ganó popularidad en 2010 y que ha sido difundido como una alternativa para dejar el cigarrillo convencional hecho con tabaco. Que disminuya la adicción (principal argumento de algunos proveedores) es algo que no se ha comprobado.

El debate en países como España, Reino Unido y Colombia ha sido similar. Mientras las empresas señalan que el cigarrillo electrónico sirve como sustituto del tabaco porque imita los estímulos sensoriales de la experiencia del fumador, organizaciones médicas se oponen a la comercialización abierta de este dispositivo porque la consideran “una puerta de entrada al tabaquismo”.

En el Congreso, el debate completó 21 meses. El senador Mauricio Lizcano (partido de la U) presentó a finales de 2014 el proyecto de ley para que se prohibiera la venta de cigarrillos electrónicos a menores de edad (pueden costar hasta 100 mil pesos). También prohibía el uso de este dispositivo en espacios cerrados y su promoción en todo el territorio nacional.

En el transcurso del proyecto hubo cambios. Eliminaron el artículo que prohibía utilizarlos en espacios cerrados y se autorizó la publicidad con algunas restricciones. La semana pasada, el senador Álvaro Uribe, líder del Centro Democrático, propuso que en lugar de expedir una nueva norma se incluya al cigarrillo electrónico en el marco de la ley antitabaco de 2009 (Ley 1335). Pese a que el proyecto del senador Lizcano había sido aprobado en dos debates anteriores en la Comisión Séptima del Senado, a último momento se acogió la petición del expresidente Uribe.

Lo que viene

Se espera que la próxima semana sea estudiado el proyecto de ley en plenaria del Senado. Sin embargo, algunos congresistas se han mostrado preocupados ante la posibilidad de que se hunda. Si no se logra una conciliación entre Senado y Cámara la iniciativa no verá la luz.

Aunque no se han manifestado públicamente, las empresas que comercializan el cigarrillo electrónico también están inquietas. La razón: las restricciones son más drásticas si se aplica la ley antitabaco al cigarrillo electrónico (no podrían patrocinar eventos, habría restricciones en cajetillas, la publicidad quedaría restringida por horarios, etc).

En el fondo, el ministro de Salud, Alejandro Gaviria, está de acuerdo con el senador Uribe en lo que respecta a la regulación del cigarrillo electrónico. “El propósito en este debate es uno solo: la protección de la salud pública. Ha surgido una alternativa muy interesante y es que la regulación del cigarrillo electrónico sea idéntica a la que tiene el tabaco. Queremos movernos hacia una regulación idéntica, aprobando las prohibiciones que existen en temas de promoción, prohibición de la venta a menores de edad, advertencias...”

Blanca Llorente, directora de la Asociación Anáas (ONG especializada en la promoción de la salud pública basada en evidencia), también respalda la propuesta del expresidente. “Nos parece conveniente la iniciativa. El proyecto como había quedado aprobado permitía la promoción y el patrocinio y abría la posibilidad de que los usuarios utilizaran el cigarrillo electrónico en espacios cerrados. Ahora es necesario que el Ministerio de Salud evalúe los riesgos, pero de acuerdo con nuestra evidencia es mejor armonizar la regulación con el cigarrillo tradicional”.

El senador Mauricio Lizcano, que trabajó dos años en el proyecto, quedó sorprendido con la modificación que introdujo Uribe. Sin embargo, dice que está “tranquilo” con el resultado: “mi proyecto buscaba equiparar las sanciones del cigarrillo normal al electrónico. Nuestro objetivo es que los niños no tengan acceso a ese dispositivo, que no se utilice en colegios, cafeterías ni aviones. Y que exista una regulación por parte del Invima. Con lo que hizo Uribe, se cumplen esos requisitos”.