¿Y las víctimas de los artefactos bacrim?
Desde el 2007 hasta la fecha tenemos reportes de 52 hallazgos relacionados con el uso de minas antipersonal por las bandas criminales en el país.
Sin embargo, no tenemos registrada una sola víctima comprobada, a pesar de que sabemos que estos artefactos explosivos son utilizados por estos grupos para responder a la ofensiva de las autoridades.
En Antioquia, por ejemplo, la Fuerza Pública ha encontrado minas que pertenecen a bandas criminales en 7 municipios: Cáceres, Cañasgordas, Caucasia, Medellín, Puerto Berrío, Sopetrán y Valdivia.
En Colombia hay 650 municipios afectados con minas del conflicto, de los cuales en 488 hay víctimas civiles y de la Fuerza Pública desde el primer reporte.
En total en el país han sido víctimas de esta práctica ilegal 11.137 personas y tan solo este año llevamos reportadas 116 víctimas.
Colombia ocupa el primer lugar con mayor número de militares afectados en el mundo, el segundo es Siria. Además, ocupamos también el segundo lugar en víctimas menores de edad, 1.137, el primer puesto lo tiene Afganistán.
Pese a toda la gravedad del tema, si analizamos los últimos cinco años, en 2010 hubo 677 víctimas y en 2014, 286. Hemos logrado una disminución importante.
Lo que sucede ahora en el proyecto piloto de desminado humanitario que estamos haciendo en la vereda El Orejón, de Briceño, se debe finalizar en cuatro meses y estamos haciendo los estudios para comenzar en Meta.
Colombia tiene la tarea de desaparecer de los primeros lugares. No podemos aceptar una sola víctima más.