El Bloomsday, el día en que James Joyce alimenta la industria del turismo en Dublín
El debate sigue vivo: la novela de James Joyce todavía es motivo de debate de la crítica literaria.
Pocas novelas tan importantes para una lengua como Ulises, de James Joyce. Y, al tiempo, pocas novelas tan polémicas. El Ulises, de Joyce, marca un antes y un después en la forma novelística, constituye una rara ruptura en la tradición literaria. Y, por si fuera poco, también es motivo para que la industria del turismo en Irlanda -en particular en Dublín- se frote las manos y reciba a miles de turistas. Se trata del Bloomsday.
No hace falta leer El Quijote para conocer de qué va el asunto de los molinos de viento. Tampoco hace falta internarse en las líricas genealogías de Cien años de soledad para comprar los suvenires de las mariposas amarillas. Así también no se requiere leer las complejas páginas de el Ulises para saber que su trama novelística se desenrolla el 16 de junio. En efecto, los momentos culminantes de la historia de Leopoldo y Molly Bloom transcurren en esta fecha, que se ha convertido en una de las efemérides literarias más importantes de la literatura del siglo XX.
El Bloomsday consiste en recorrer las calles de Dublín narradas en la novela y tratar de ver los escenarios que los personajes transitaron en sus diferentes momentos narrativos. Este año hay un motivo especial para conmemorar la fecha: se cumplen cien años de su publicación. Editada por Sylvia Beach, la ficción provocó entre lectores y autoridades una polémica grande: los aplausos no fueron unánimes y apenas pudo circular sin censuras en Irlanda hasta el decenio del sesenta.