Cada libro de Lucía Estrada trae su forma
Su libro Katábasis, Premio de Poesía Ciudad de Bogotá 2017, entregado por Ideartes, se lanzó en abril. Conozca a la poeta.
Periodista. Estudiante de maestría en Estudios y Creación Audiovisual.
Comenzó a publicar de muy joven, con solo 17 años ya tenía escrito su primer libro. Después de 21 años dedicada a la poesía, 11 textos forman su colección personal.
La poeta Lucía Estrada le contó a EL COLOMBIANO sus pasos, referentes y consejos.
¿Se nace o se hace poeta?
“Hay una disposición natural en el poeta para advertir la esencia de las cosas, su singularidad, su llamado. Hay, también, una atención y una tensión distintas que le permiten nombrar el mundo, hacer de la palabra su camino. Pero ahí empieza el duro trabajo. Cavar en la palabra, en lo que ha visto y oído. Día y noche, con tenacidad y rigor”.
¿Cómo empieza a escribir?
“Ocurre que algo empieza a inquietarte. Va tomando forma. Como decía Supervielle, el poeta es ese trabajador al que nunca se le ve trabajar. Mientras conversas con alguien, mientras trabajas en otra cosa, esa inquietud persiste, va construyéndose en silencio hasta que un día te sientas a escribir porque ya se han definido sus contornos.
¿Cuándo y cómo lee?
“Trato de no pasar un día sin leer. Generalmente lo hago en las noches. Es como una recompensa después de una larga jornada”.
¿Qué poetas prefiere?
“Pregunta difícil porque son muchos, pero mencionaré algunos nombres: Rilke, Celan, Jabès, Olga Orozco, Marossa Di Giorgio, Aurelio Arturo, Varela, Plath, Pavese... En diez minutos podría mencionarte otros”.
¿Cuáles son sus referentes de lectura?
“Uno intenta acercarse a ellos, alimentarse de ellos. Y estas presencias transforman definitivamente tu vida, tu escritura. Para mí, por ejemplo, fue fundamental leer a Rilke. Desde sus Elegías hasta sus Cartas a un joven poeta. Ahí entendí muchas cosas que luego iba a necesitar”.
¿Qué es Katábasis?
“Es una palabra griega que significa descenso. Y es lo que hago en el libro. Una excavación si se quiere. Indago en aquello que ha constituido mi experiencia vital y poética”.
¿Le salió escribirlo en prosa poética?
“La prosa poética siempre me ha gustado. Muchos de los poetas que leo y admiro, o que han influido en mi trabajo, han escrito bajo esta forma: Aloysius Bertrand, Baudelaire, Rimbaud, Olga Orozco, Lautrèamont, Marossa Di Giorgio, y tantos otros.
Escribí en prosa poética Maiastra en 2001, y ahora Katábasis. No sé. Hay otro ritmo, otra posibilidad de expresión. Creo que cada libro trae su necesidad, su forma”.
¿Qué le recomienda a quien empieza a escribir poesía?
“Leer mucho, saber escuchar y tener paciencia”.