La historia de Rosa Flor del Campo, la campesina de Santa Elena que guía a los turistas en la Feria de las Flores
Cristina Salas, nombre verdadero de Rosa Flor del Campo, inspiró el personaje en su abuela, originaria de Peque, Antioquia, quien llegó a Medellín huyendo de la violencia.
En el cierre de la Feria de las Flores 2025, en Medellín se destaca Rosa Flor del Campo, una campesina que con su canasta de girasoles y rosas acompaña a los turistas hasta el corazón de las fincas silleteras.
A este personaje le da vida Cristina Salas, guía turística y estudiante de Tecnología en Gestión de Guianza Turística en la Institución Universitaria Colegio Mayor de Antioquia.
Puede leer: ¿Quiénes serán los jurados del desfile de silleteros? Mariana Pajón es una de las elegidas
Cristina usa esta figura para mostrar a los turistas la cultura campesina en barrios como Manrique y en las fincas silleteras de Santa Elena, donde se producen las tradicionales silletas que este domingo 10 de agosto recorren las calles de Medellín en la edición número 68 del Desfile de Silleteros.
Rosa Flor del Campo fue inspirada en la abuela de Cristina, Rosa Olivia Salas, originaria de Peque, Antioquia, quien llegó a Medellín huyendo de la violencia. A través de este personaje, Cristina busca dar a conocer la realidad y el trabajo de las campesinas que forman parte de la historia y tradición de la región.
Relacionado: En Medellín rugieron los motores y los corazones para honrar a los héroes de la patria
“Rosa realmente quiere estar en todo Medellín. Quiere que la gente conecte mucho con el campesino, con sus valores. Es un personaje que te invita a conocer mucho más la ciudad con alguien que dice frases coloquiales, que es como una abuela, una madre, una tía que tiene esas raíces tan profundas que te las quiere transmitir”, dice Cristina a la Alcaldía de Medellín.
Además de guiar a los visitantes, Cristina combina su trabajo con sus estudios y la crianza de su hija. Como madre soltera de una niña de nueve años, ha trabajado en papelerías, almacenes y pizzerías y ha tenido que compaginar su trabajo con estudios virtuales y su pasión por el turismo. Su dedicación a formarse profesionalmente es clara.
“Realmente el estudio es fundamental. El estudio que me ha dado Sapiencia para poder ser una muy buena guía es lo que fortalece mucho a Rosa para poder hablar con la gente, para poderse expresar porque yo siempre lo he dicho: ser guía no solo es saberlo hacer, sino hacerlo con mucho amor y mucho cariño”, aseguró.
Actualmente, Salas trabaja en agencias de turismo, recibe solicitudes de viajeros de Estados Unidos, México y Europa, y sigue recorriendo las calles como Rosa Flor del Campo.