En Cannes se sigue viendo arte
El Festival cerró siendo un contrapeso al cine más comercial, con voces cada vez más diversas.
Periodista cultural del área de Tendencias de EL COLOMBIANO.
Una periodista estadounidense termina viviendo una historia de amor, mientras trata de escapar de Nicaragua; la amistad de dos niños se ve truncada de manera inesperada y dos influencers son invitados a un crucero de lujo, pero terminan envueltos en una lucha de poder cuando se levanta una peligrosa tormenta. Suspiros, llantos y risas es lo que arrancaron de las audiencias tres de las películas reconocidas en el Festival de Cannes, una muestra de la diversidad y originalidad de las miradas de los realizadores activos en el mundo.
El primer argumento corresponde a “Stars at Noon”, dirigida por la francesa Claire Denis, y el segundo es de Close, del belga Lukas Dhont. Ambas se llevaron el Gran Premio del Festival “ex aequo”, es decir, en un empate. El tercero corresponde a “Triangle of Sadness”, la película del director sueco Ruben Östlund, quien se llevó por segunda vez en su carrera la Palma de Oro por su trabajo. Antes se la había ganado cuando presentó “The Square” en 2017.
Este año el espíritu festivo del regreso a la “normalidad” se sintió en el encuentro. Las películas hollywoodenses tuvieron estrenos extravagantes y llenos de luminarias, como “Top Gun: Maverick” de Tom Cruise que estuvo acompañado de ocho aviones de la Patrulla Aérea francesa, “Armageddon Time” que llevó a Julia Roberts y Anne Hathaway a caminar por el tapiz rojo, y “Elvis”, de Baz Luhrmann, que además de sus famosos protagonistas, Tom Hanks y Austin Butler, tuvo como invitados a los cantantes Shakira, Kylie Minogue, Ricky Martin y el grupo italiano Maneskin, que colaboró en la banda sonora.
Mientras tanto, los premios a los mejores actores se los llevaron figuras consagradas de cinematografías periféricas. La mejor actriz fue la iraní Zar Amir Ebrahimi, que tuvo que huir de su país después de que saliera a la luz pública un video sexual suyo, y el mejor actor fue Song Kang-ho, el coreano que protagonizó “Parásitos”.
Aunque hubo varias mujeres premiadas, incluidas la japonesa Chie Hayakawa por “Plan 75” y las estadounidense Gina Gammell y Riley Keough por “War Pony”, no se alcanzó la paridad en el número de películas nominadas de producción femenina y masculina. También fue polémico un panel para hablar sobre el futuro del cine al que no fue invitada ninguna mujer.
Curiosamente, una de las codirectoras de “War Pony”, que se llevó la Cámara de Oro a mejor ópera prima, es nieta de Elvis Presley. La cinta cuenta la historia de dos jóvenes que crecen en una reserva indígena de Dakota del Sur, contraste absoluto con la frenética biopic sobre su abuelo. El lenguaje del cine puede contar todas las historias