Cultura

“Violeta”, la nueva novela de Isabel Allende está inspirada en su madre

Periodista cultural del área de Tendencias de EL COLOMBIANO.

24 de enero de 2022

“Violeta” son las memorias de una abuela, que deja a su nieto como herencia en una carta, la historia de su vida. Es un recorrido vital lleno de contrastes entre desengaños amorosos y romances apasionados; pobreza y prosperidad; alegrías y pérdidas, todo entre dos pandemias. Los personajes están inspirados en familiares y conocidos de Isabel Allende, como su madre y su mejor amigo, el sacerdote jesuita Felipe Berríos.

Aunque la acción no se sitúa en un país en específico, es claro que contiene mucho de Chile. En la rueda de prensa de lanzamiento, la escritora explicó que no quiso dar el nombre del país donde suceden la acción para no estar forzada por el rigor de la historia, para darse licencia en las fechas de los acontecimientos en favor del ritmo de la narración, además, para que un rango más amplio de países pudieran identificarse con las situaciones que se plantean, recurso que ya había usado en Eva Luna y La casa de los espíritus.

Sin embargo, la escritora afirmó que siempre vuelve a Chile en su escritura, aunque es el Chile de su recuerdo, donde vivió hace cuarenta años. “Tengo una vida de muchos años ya en California, tengo a mi hijo, mi nuera y mi marido, no cuento mis nietos porque se pueden ir en cualquier momento, pero internamente soy profundamente chilena, no me lo puedo sacar de adentro. En California soy extranjera, pero estoy muy cómoda; cuando voy a Chile, la primera semana estoy feliz, pero después soy extranjera”, dijo.

El mundo de hoy

Aunque para Allende, Violeta habría votado por la derecha conservadora en las últimas elecciones de su país, también cree que se alegraría por la posibilidad de cambio que significa Gabriel Boric, pues el sistema de clases de Chile es demasiado rígido e inequitativo, casi como el de castas de la India y a Violeta le resultaría chocante.

Según Allende, hay varios cambios alrededor del mundo y las nuevas generaciones con sus ideas seguramente llevarán la sociedad a otro nivel, lo único que ella lamenta es no poder estar viva para presenciarlo.

Estos cambios de mentalidad dice poder percibirlos en los diferentes medios y narrativas, por ejemplo, en lo referente a la comunidad LGBTI y a las mujeres, pero hay tareas pendientes en cuanto a la educación de las niñas y cómo se trabajan los fenómenos que las afectan en el resto del mundo, como el tráfico y la explotación.

Vivir el presente

La escritora, que este año cumple los 80, siente que su vida ha cambiado con la edad, aunque no quiere circunscribirse en la vejez, porque no se siente vieja, ya tiene la libertad de no hacer lo que no le gusta y prefiere no planear a largo plazo, pues no sabe cuánto tiempo más vivirá.

Por lo pronto, mientras su mente siga en buenas condiciones, quiere seguir escribiendo, que es lo que más le gusta hacer, y le sorprende que siga fluyéndole de la misma manera que le fluía con sus primeros títulos.

También se refirió a la serie Isabel de Amazon Prime Video que narra su vida. Para algunos miembros de su familia, se expuso demasiado, pero para ella, los guionistas no dijeron nada que ella no hubiera compartido ya en sus libros, por lo que la misma autora se había expuesto antes que nadie. Además, sus faltas son “no son pecados originales sino comunes”.