Ciclismo

El BMX trabaja pensando en relevo de los olímpicos

Laura Arango es el vivo ejemplo de ese proceso en Antioquia. Hace parte del grupo de muchachos que se perfila para suceder a Mariana y Oquendo.

Cuyabra. Comunicadora social-periodista de la Universidad del Quindío. Redactora del área de Contenidos Digitales.

30 de marzo de 2019

Ver a Mariana Pajón subirse al podio de los Juegos Olímpicos de Londres-2012 fue el impulso que finalmente acercó a Laura Arango al bicicrós.

Creció viendo a su hermano Simón saltar los peraltes en la pista de Belén mientras jugaba con muñecas porque, aunque le pedía insistentemente a Sandra, su mamá, que la dejara practicar este deporte, ella no se lo permitía.

Pero cuando Mariana se colgó su primer oro olímpico todo cambió. Su mamá le dio el aval para correr y, a los 11 años, dejó el voleibol para iniciar su carrera en el deporte que siempre la apasionó.

Y no ha defraudado la confianza de su familia. En su primera carrera, con menos de dos meses de entrenamiento, se subió al primer lugar del podio y no ha parado de sumar títulos y reconocimientos dentro y fuera del país.

Ahora, con 18 años y muy cerca de la categoría élite, Laura está siendo arropada por Carlos Mario Oquendo y la propia Mariana, experimentados bicicrosistas que con su ejemplo, inspiran a quienes vienen detrás de ellos.

“Entrenar al lado de Mariana, Oquendo o Andrea Escobar o recibir consejos de ellos antes de una competencia, ponerlos en práctica y que den resultados, me llena de mucha satisfacción y hace que quieras aprender más de ellos”, comenta Laura, que espera triunfar en el año que le queda en la categoría júnior y así seguir perfilándose como el relevo de los campeones.