“Seguimos a rueda, mañana será otro día”, Nairo Quintana tras la etapa 17 del Tour de Francia

El colombiano Nairo Quintana (Arkéa Samsic) sigue haciendo gala de su combatividad en la edición 109 del Tour de Francia, que este miércoles tuvo su etapa 17, un recorrido de 129,7 kilómetros entre Saint-Gaudens y Peyragudes.

El ciclista cafetero de 32 años de edad se niega a darse por vencido y en esta jornada participó en una de las fugas de la mitad de la fracción, sin embargo, esta no rindió frutos.

“Mañana será otro día, igual el sobregiro de motor que hicieron este miércoles la mayoría, es posible que lo paguen mañana”, expresó.

Igualmente, el antioqueño Rigoberto Urán intervino en otro intento de escapada que tampoco pelechó.

Pero el ritmo fuerte que impusieron quienes iban en punta de carrera, terminó por pasarle factura a Nairo quien se quedó un poco rezagado, incluso con riesgo en ese momento, de perder el cuarto lugar de la general.

Pero el boyacense sacó a flote la combatividad que lo caracteriza en el ascenso a la final y a la postre llegó a 3’33” de Tadej Pogacar (UAE Team Emirates), quien cruzó primero la línea de meta, tras tomarle ventaja en los últimos kilómetros al dánes Jonas Vingegaard (Jumbo-Visma), quien se mantiene forme en el primer lugar e incluso en cada jornada le toma tiempo a sus persecutores.

Finalmente, Quintana logró conservar el cuarto lugar de la clasificación general en la que ahora aparece 7’53”. Así las cosas, perdió tiempo respecto a quienes lo anteceden y el quinto, David Gaudu (Groupama-FDJ), le respira en la nuca, pues quedó 7’57” del primer lugar.

Aun así, el pedalista cafetero no desfallece y ya piensa en lo que se viene. Quintana celebró el hecho de mantenerse cuarto, pues, aunque sus posibilidades de meterse al podio también se alejaron un poco, el no renuncia a esa posibilidad.

“Seguimos a rueda, sabemos que hay otros corredores que realmente tienen mucho equipo y les han ayudado a salvar un día y otro; de mi parte yo creo que mañana estaremos muy bien nuevamente”, agregó.

El boyacense considera que si se analiza el ritmo frenético que marcaron quienes iban adelante, el balance personal para él, no es para nada malo. “Este jueves puede pasar de todo, puede pasar cualquier cosa. Habrá una etapa mucho más dura, con altura desde la salida, con el primer puerto que tenemos, el segundo puerto todavía más duro y un último repecho”, vaticinó.

Finalmente, Quintana también valoró el esfuerzo que han hecho sus compañeros del Arkea, que también han jugado un papel trascendental en su presentación en esta edición de la ronda gala, en la que no renuncia a la posibilidad de alcanzar un lugar entre los tres primeros de la clasificación general.

“Nuestros jóvenes son todo su corazón, dan todo su esfuerzo, pues hacen lo que más pueden y me han cuidado también para poder estar en la posición. Tampoco estoy solo, no lo hago solo porque detrás están mis compañeros que peleamos todos para un mismo lado y todos tenemos la motivación de poder tener una foto en el podio de París”, concluyó