El coronel Saundersde Envigado
George lleva un año en el club. Ya es el segundo capitán y uno de los baluartes en este buen inicio de Liga.
Comunicador social y periodista de la UPB. Disfruto de un libro de Saramago, un regate de Iniesta y un drive de Federer.
No es estadounidense como Harland Sanders, el creador de la famosa franquicia de Kentucky Fried Chicken (KFC). Es George Saunders, un inglés que emigró a Colombia, en 2013, en busca de imprimir su sello en el balompié del país.
Hace un año dio el paso a Envigado y encontró, según él, el ambiente propicio para dejar su imprenta, como fue Salt Lake City (Estados Unidos) para el comienzo de la multinacional del pollo frito.
El volante dialogó con este diario sobre su presente en el equipo naranja, en el cual es el segundo capitán, y la forma en la que Colombia le absorbió su corazón.
¿Qué significa portar la cinta de capitán del Envigado?
“Los técnicos notan que puedo ser un líder. Soy uno de los más experimentados (27 años) y, cuando no está Andrés Orozco, han depositado la confianza en mí. Es un orgullo liderar un club, sobre todo uno que me ha acogido muy bien”.
Habla muy bien el español, ¿cómo ha aprendido a dominarlo?
“Yo aprendí castellano cuando me fui vivir a España, con mis padres, a los 8 años. De todas maneras, sigo pensando en inglés, es mi primer idioma”.
¿Qué resalta de cada una de las ciudades donde estuvo?
“He aprendido y disfrutado de todas. El club que más me impactó fue América por la hinchada, por lo grande que es y cómo viven el fútbol. En Fortaleza tuve una buena experiencia con un equipo nuevo, que estaba en la B, pero por una lesión me tocó irme cedido al Unión Magdalena, en el que tuve seis meses duros. En Patriotas no encontré muchas posibilidades, pero sí un técnico (Hárold Rivera) que me puso a probar en varias posiciones del campo. Soy muy agradecido con todos”.
¿Y en Envigado cómo se ha sentido?
“Ha sido el lugar más especial. La forma en que me han acogido, el trato especial de la gente, el clima y las cosas que hay por hacer”.
¿Qué le gusta hacer en su tiempo libre en Medellín?
“Me gusta mucho la comida de acá, por eso visito los buenos restaurantes, salir con mi mujer y la hija de ella, ir a cine y pasear”.
El equipo marcha en los primeros lugares de la Liga, ¿a qué se debe?
“Hay un grupo muy sano, con muy buen talento. Cada vez llegan muchachos que refrescan el equipo y hemos apuntado a formar una familia basada en la unión. En la cancha se ve un bloque, un equipo compacto, en el cual cada uno pelea por su compañero”.
Muy poco se sabe de la forma de trabajo de los Rescalvo, ¿cómo es su modo de entrenar?
“Son excelentes entrenadores. Basan su idea de juego en la pelota, los entrenamientos siempre son con balón. Son inteligentes y saben hablarle al grupo. Es duro tener contentos a todos, pero ellos lo logran”.
Luego de estos tres años, ¿cómo analiza el momento del fútbol colombiano?
“Se ha vuelto muy competitivo, ya no hay tantas diferencias entre grandes y chicos, el otro día le ganamos al campeón. Acá se ve mucho talento, mucha habilidad, los cazatalentos miran es para Colombia. Y el momento de Nacional en Libertadores lo demuestra”.
¿Está de paso en el país?
“Yo aquí vivo el día, es un país maravilloso, estoy agradecido por cómo me aceptan. Estoy muy feliz y no tengo prisa alguna en irme”.