Fáber Cañaveral, la única cara nueva del Envigado

Difícil, por no decir complicada, es la situación que atraviesa el Envigado Fútbol Club. Y todo por cuenta de su aparición en la Lista Clinton, que le impide, por lo pronto, hacer negocios con facilidad.

Por eso, no fue raro que ayer apenas se viera una sola cara nueva y más de 24 jugadores de las inferiores del club, acompañando a otros 24 profesionales, liderados por Andrés Orozco y Bréiner Castillo, quienes ponen el toque de experiencia.

En esta última tanda, era de esperarse ver en plenos ejercicios físicos al único refuerzo oficial del Envigado, Fáber Cañaveral, un vallecaucano, nacido en Cali y quien jugó la temporada anterior con Uniautónoma.

“Vengo con la misión de ganarme el puesto entre los once titulares. Ese es mi objetivo. Después, ir creciendo en rendimiento y darle todo mi potencial a un equipo que creyó en mí”, dice Cañaveral.

La práctica es intensa, el calor pega duro y en la cara de Cañaveral se refleja ese cansancio, al término de la jornada.

“Comenzar es duro y yo espero bajar, por lo menos, dos kilos que tengo de más, fruto del periodo de vacaciones”.

Para quien pasó por Cali, Millonarios, América y Uniautónoma, Envigado “representa una gran vitrina y me puede abrir las puertas para ir al fútbol de Europa o al de México”.

A sus 26 años, reconoce que su puesto preferido es el de volante mixto, “porque me gusta arrancar desde la segunda línea”.

Se siente orgulloso por llegar a un departamento muy futbolero, como Antioquia, que es exigente para los jugadores “pero en la medida que uno responda, significa que le puede abrir las puertas para llegar a un equipo grande”.

Solo lleva tres días en Envigado, porque llegó el lunes y ayer en la mañana recibió el visto bueno del médico Carlos Mario Muñoz para entrenar.

“Soy soltero, vivo con mi mamá y una hermana, que espero poder tener muy pronto acá, porque ambas dependen de mí. Además, es una tranquilidad tenerlas cerca”.

Un reto grande

Ante la salida de Mateus Uribe y Juan Carlos Quintero, la responsabilidad le quedará a Fáber, quien espera salir adelante con el reto de suplir en el club naranja la ausencia de dos jugadores de alto nivel.

“No es nada fácil reemplazar jugadores de esas condiciones, pero yo confío en mi trabajo y mi fútbol. Estoy seguro que le aportaré toda mi capacidad futbolística a mi nuevo equipo”.

Al igual que la plantilla principal, Cañaveral fue citado para el segundo entrenamiento ayer a las 4:00 p.m. y seguir hoy a las 8:00 p.m. en la unidad deportiva de Belén .