Fútbol

River-Boca, a vencer la adversidad

El estrés y las dificultades que se vivieron previo a la final pueden incidir en el resultado.

Periodista de la Universidad del Quindío. Cuyabra hasta los huesos y mamá de un milagro llamado Mariana, amante de la salsa y apasionada por el deporte.

07 de diciembre de 2018

A las cargas de trabajo y competencia por los compromisos, tanto en el torneo local como en el campeonato internacional, los jugadores de Boca Juniors y River Plate le han tenido que sumar el cansancio de un viaje de casi 12 horas para jugar en el exilio, aspectos que según los expertos consultados, podría tener repercusión positiva o negativa para los integrantes de ambos planteles.

Para el motivador deportivo Luis Alfonso Sosa existen dos tareas fundamentales que los profesionales de los dos clubes tienen que realizar antes del partido del domingo: el dolor por estar fuera de casa y el manejo de la adversidad, ya que todos los sucesos que antecedieron el encuentro pueden generar estrés y ansiedad en los jugadores.

“Es vital que se haga un trabajo mental fuerte, porque así sean deportistas de élite, necesitan quitarse toda esa presión de lo que ha pasado. La incertidumbre de si se iba a realizar o no el duelo por no poder disputar la final en su país, tener que viajar a Europa en medio de un entorno ajeno, etcétera. La clave debe estar en convertir todas esas circunstancias en oportunidades para alcanzar el objetivo”, argumentó Sosa.

Ramón Vásquez, preparador físico de Rionegro Águilas, afirma además que, debido a la personalidad que caracteriza a los jugadores argentinos, seguro les va a pesar en su parte sicológica no estar en casa, con su gente, en su hábitat normal.

“Yo como uruguayo quiero jugar en mi país una final como la Libertadores, por eso creo que los futbolistas no deben estar cómodos con tener que disputar el encuentro tan lejos de Argentina, en otro continente, eso no es lo ideal”.

Andrés Orozco, exjugador de Medellín y de la Selección Colombia, quien ahora está dedicado a la dirección de divisiones menores en Envigado, considera, según su experiencia, que más allá de todo lo que rodeó esta atípica final de Copa, los jugadores saben que están ante una oportunidad que, generalmente, solo ocurre una, o quizás dos veces en la carrera profesional. Por ello, cuando salgan a la cancha, no cree que el partido vaya a carecer de emociones y calidad de juego.

“Ambos llegan en igualdad de condiciones, tanto físicas y mentales, con un desgaste por un viaje largo y el dolor de estar en el exterior, pero con la convicción de que está de por medio el honor de su club, y el título que todos los que vivimos en este continente queremos ganar”, sostiene.

El exzaguero mencionó que, como aficionado al fútbol, el domingo volverá a estar atento al compromiso entre los dos grandes de Argentina. “Seguro será un gran espectáculo y quedará en la historia. Ojalá sea una final inolvidable”, concluyó .