Seis grandes en riesgo de despedirse de la Copa Sudamericana
Por Colombia busca la clasificación América de Cali, Once Caldas es líder de su serie.
El pase a octavos de final o la repesca. Con esta consigna, seis grandes abordarán la sexta y última jornada de la fase de grupos de la Copa Sudamericana, que repartirá esta semana sus últimos cinco cupos directos a la ronda de los 16 mejores.
Independiente, Corinthians, América de Cali, Gremio, Fluminense y Atlético Mineiro esperan unirse a la Universidad Católica de Ecuador, al sorprendente Mushuc Runa y a Lanús en la siguiente fase del segundo torneo de clubes de Sudamérica.
Pero varios de ellos deberán contentarse con un pase a playoffs o, peor aún, con decir adiós precozmente a una competición que en esta edición ha sido ambientada de forma inesperada por varios clubes sin gran recorrido internacional.
Aquellos que lideren su zona ingresarán directamente a los octavos mientras que los segundos irán a la repesca, donde en julio enfrentarán, en juegos de ida y vuelta, a los cuadros de la Copa Libertadores que queden terceros en sus grupos.
Independiente, máximo ganador de la Libertadores con siete coronas, tiene en sus manos avanzar, pues lidera el Grupo A con 9 puntos y recibirá el miércoles al boliviano Nacional Potosí (tercero, con 7).
El Rey de Copas argentino puede clasificar incluso con un empate, desde que Guaraní (segundo, 8) no derrote al colista uruguayo Boston River (4) en Asunción.
“Las cosas importantes se construyen de a poquito y hay que dar un pasito más”, dijo el entrenador rojo, Julio Vaccari.
Definición del grupo de la muerte
Más complicada está la situación en el Grupo C, en el que tres equipos de tradición se disputan dos boletos: el líder Huracán (11), que recibirá el martes al escolta Corinthians (8), y el América (7), que parece tener un pulso sencillo contra el eliminado Racing de Uruguay (0).
En el choque en Buenos Aires, donde puede reaparecer la estrella corinthiana, el neerlandés Memphis Depay, en la recta final de una recuperación física, es posible que haya un descabezado.
Si el Globo y la Mechita triunfan, el Timão de Dorival Júnior, el segundo club más popular de Brasil, deberá guardar su pasaporte. Pero una victoria de los paulistas, que podrían rotar su nómina de nuevo, despachará a los colombianos de la competencia internacional.
“Tenemos un partido muy importante, dejamos de conseguir algunos resultados en juegos pasados y ahora tenemos que rescatarlos”, dijo el exseleccionador de la Canarinha.
En las llaves F y H, en cambio, no habrá necesidad de sacar la calculadora, pues la matrícula a octavos saldrá del choque que tendrán los punteros el jueves: Once Caldas ante Fluminense y Cienciano contra Atlético Mineiro.
Dos cara a cara
El Maracaná será testigo de un cara a cara entre campeones de la Libertadores (el Flu en 2023, el Once en 2004). El ganador se quedará con el tiquete a octavos y el perdedor irá a la repesca.
Los cariocas han guardado fuerzas para la Sudamericana en un intento de su entrenador, Renato Portaluppi, de administrar las cargas físicas.
Los de Manizales, en tanto, confiarán en la letalidad del experimentado artillero Dayro Moreno para zarandear a un favorito.
“Será un juego difícil, un juego tenso”, avisó el DT del Fluminense.
También en Brasil, aunque en Belo Horizonte, el Galo (8 puntos) buscará dar un golpe de Estado al líder Cienciano de Perú (9), que sin importar el resultado tiene asegurada como mínimo su presencia en playoffs.
Aunque parece improbable, el Caracas (tercero, 5) podría meterse a la repesca si golea al eliminado chileno Deportes Iquique (4) y el Mineiro de Hulk sufre una derrota abultada.
Más tensionante será la definición del Grupo D, en el que a Godoy Cruz puede bastarle una igualdad el jueves contra el eliminado Atlético Grau de Perú en Mendoza.
Los argentinos, líderes con 11 unidades, podrían incluso perder desde que su principal perseguidor, el alicaído Gremio, no se imponga al colista Sportivo Luqueño en Porto Alegre.
El tricolor gaúcho, comandado por Mano Menezes, está muy tocado tras caer en la tercera ronda de la Copa do Brasil frente al CSA, de la tercera división.
“La responsabilidad es toda mía”, dijo el exseleccionador brasileño.