Un calvario de agresiones vivió Nacional en su duelo contra Cúcuta, antes, durante y después del partido
Bus fue atacado con piedras, ladrillos y en el campo los jugadores fueron agredidos con botellas y bengalas.
Periodista de la Universidad del Quindío. Cuyabra hasta los huesos y mamá de un milagro llamado Mariana, amante de la salsa y apasionada por el deporte.
No solo fue el ataque que recibió el bus de Atlético Nacional camino al estadio General Santander, sino que durante el compromiso que ganó el verde 0-3 y luego del compromiso, jugadores, cuerpo técnico y directivos del Rey de Copas recibieron agresiones.
Lo vivido en Cúcuta fue traumático para los jugadores, que mientras se desplazaban rumbo al estadio fueron agredidos con ladrillos, piedras y otros objetos contundentes, que generaron daños al vehículo que los transportaba y Alfredo Morelos resultó herido, aunque no de gravedad.
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Y las cosas no quedaron ahí: tras ingresar al estadio y luego de empezar el encuentro, los jugadores del verde siguieron recibiendo agresiones; cada que se determinaba un tiro de esquina llovían latas de cerveza, botellas de agua y otros elementos (monedas) con los cuales se buscaba causarle daño al futbolista.
A pesar de los reclamos del técnico Javier Gandolfi y de algunos jugadores como Edwin Cardona, el árbitro Jhon Ospina decidió que el compromiso se disputara.
En el segundo tiempo, tuvo que hacer presencia en el campo de juego, un grupo de policías del antiguo Esmad para tratar de proteger a los jugadores en los cobros de tiro de esquina, y para la salida de campo tras el final del compromiso.
En redes sociales, tanto Atlético Nacional como aficionados y personas del común han compartido videos no solo de cómo quedó el bus tras el ataque, sino de las agresiones durante el partido.
Además, tras finalizado el encuentro, el equipo no pudo salir a la rueda de prensa por falta de garantías de seguridad y permanecieron en el estadio durante un largo periodo de tiempo a la espera de poder salir sin correr peligro.