Independiente Medellín

En DIM, “somos otra vez lo que éramos”: Zambrano

El ambiente en las toldas rojas ha cambiado de forma tal que el estratega ecuatoriano asegura que en adelante el DIM será un hueso duro de roer.

Soy periodista porque es la forma que encontré para enseñarle a mi hija que todos los días hay historias que valen la pena escuchar y contar.

07 de marzo de 2019

Cuando los jugadores no sientan el apremio de abandonar la cancha tan pronto el técnico concluye el entrenamiento, y prefieren quedarse un poco más por cuenta propia, es señal inequívoca de que el ambiente en el grupo es sano y el plantel tiene la motivación necesaria.

Eso fue lo que resaltó el técnico Octavio Zambrano tras presenciar el ánimo con el que regresó la plantilla a prácticas luego de concederles a los jugadores el fin de semana para dedicárselos a sus familias, aprovechando la postergación del clásico antioqueño.

“Están todos ávidos de seguir trabajando; eso es motivante. Cuando uno ve un equipo que después de dos horas de trabajo arduo todavía quiere seguir trabajando, es porque estamos mentalmente listos para lo que viene”, pondera el entrenador poderoso, quien tiene por delante el reto de defender la localía en los tres partidos consecutivos que afrontará con el cuadro rojo en el Atanasio (Santa Fe, Nacional y Envigado).

De esta seguidilla de juegos saldrá la radiografía del verdadero nivel del elenco antioqueño para esta temporada. Y es que, ante Santa Fe, DIM no gana en casa desde 2016 (dos derrotas y un empate en los últimos tres juegos). El clásico ante Nacional tiene grandes repercusiones, puede poner a favor o en contra a la afición y Envigado, por lo visto en los últimos dos compromisos, viene en alza.

Pero el equipo está preparado para el reto, pues según Zambrano, su conjunto entró en una zona en la cual se hace un rival muy difícil para los demás rivales.

“Este equipo tiene una particularidad, y es que cuando finalmente entra en esa zona de motivación en donde no da ninguna pelota por perdida, los duelos son constantes y el equipo no entra plano a los partidos sino intenso, es muy difícil vencerlo. (...) Hemos llegado a esa zona de competencia”, ratifica el técnico ecuatoriano de 61 años.

Esta semana el trabajo ha sido de buena intensidad y le ha dado mayores luces al entrenador en relación con el módulo táctico que será definitivo en lo que resta del campeonato.

Sin embargo, en una semana tan larga, habría caído de perlas algún tipo de competencia para mantener el ritmo adquirido.

Ayer, el DIM había acordado un amistoso con el Envigado, aprovechando que el cuadro naranja también tuvo la postergación de su próximo partido ante Rionegro Águilas, pactado inicialmente para este sábado y que Dimayor reprogramó para el lunes. Aún así, por parte del Medellín se canceló el encuentro a última hora.

De todas formas hay que reconocer que el estratega rojo ha sabido sacarle provecho a los dos últimos resultados para reforzar su mensaje de cambio e influir positivamente en el aspecto mental de sus jugadores.

Por ahí dicen que lo primero que hay que hacer para lograr algo es “creérsela”, y aún en las horas más críticas el cuerpo técnico ha emitido un parte de tranquilidad y confianza sobre sus jugadores. “No éramos nosotros mismos. Estábamos en una curva descendente (...) las cosas han cambiado, este equipo está alcanzando en rendimiento que se desea”, concluye.