Nacional rescató un empate agónico en Pasto y mantiene su invicto con Diego Arias. Vea los goles
Atlético Nacional empató 2-2 con Pasto en un partido lleno de drama y polémica. Con un gol de penalti de Jorman Campuzano en el último suspiro, el Verde salvó el invicto de Diego Arias y aplazó su clasificación a los cuadrangulares.
Comunicador Social-Periodista bilingüe (inglés y español). He trabajado en Radio Bolivariana, RCN y Telemundo. Hago parte de EL COLOMBIANO. Recibí premios Ovations de la NBC. Lideré el sitio web hispano de NBCOlympics.com para los Olímpicos de Beijing 2008, edité y establecí el contenido de video original para la programación en web de la Selección Mexicana en Medios Digitales de Telemundo. Responsable de la gestión editorial de la portada de yahootelemundo.com. Enviado especial al Mundial de Rusia 2018, la Copa América en Chile 2015, los partidos de clasificación al Mundial de la Selección Colombia, la Asamblea General de la ONU en 2009, y el rescate de los 33 mineros en Chile.
Atlético Nacional vivió una tarde de resistencia, carácter y drama en el estadio Departamental Libertad. En un partido lleno de giros, emociones y decisiones polémicas, el equipo verde igualó 2-2 con Deportivo Pasto y aplazó la posibilidad de asegurar su clasificación anticipada a los cuadrangulares semifinales de la Liga BetPlay-2. Sin embargo, el empate dejó un consuelo importante: Diego Arias mantuvo su invicto al frente del equipo, que ya completa seis partidos sin perder —cuatro victorias y dos empates— desde su llegada al banquillo.
Desde el pitazo inicial, el conjunto antioqueño mostró intención y valentía. Arias apostó por un once con variantes tácticas y nombres poco habituales, demostrando que la rotación también puede ser una herramienta para competir con identidad. Cristian Uribe, normalmente lateral, acompañó a William Tesillo como zaguero central; Matheus Uribe quedó como único volante de marca, liberando a Juan Bauzá y Juan Manuel Rengifo para la creación. En punta, Dayron Asprilla fue el nueve de referencia.
Y fue precisamente Asprilla quien abrió el marcador. Apenas al minuto 12, el delantero se animó con un derechazo fulminante desde fuera del área. El balón viajó con potencia y precisión, inatajable para el arquero local. Golazo. Nacional celebraba y confirmaba lo que se veía en el terreno: un equipo con autoridad, confianza y buen trato del balón.
Sin embargo, el panorama cambió drásticamente al minuto 26. En una jugada sin aparente trascendencia, Marlos Moreno reaccionó con ímpetu tras una falta y vio la tarjeta roja directa. La imagen del extremo marchándose con la cabeza gacha lo decía todo: el Verde tendría que remar cuesta arriba durante más de una hora con un hombre menos.
A pesar de la desventaja numérica, Nacional mantuvo la calma. Cerró espacios, defendió con inteligencia y supo manejar los tiempos hasta irse al descanso con la ventaja mínima. Pero en el complemento, la superioridad de Pasto empezó a notarse. Con más aire y empuje, el conjunto nariñense encontró el empate al minuto 52, cuando Jéfferson Rivas aprovechó y envió el balón al fondo de la red.
Lejos de replegarse, Nacional siguió buscando el arco rival. Hubo carácter. Hubo alma. En una jugada polémica, el árbitro revisó una posible mano dentro del área del Pasto, pero la decisión final fue un fuera de lugar de William Tesillo, lo que desató reclamos desde el banco visitante.
El tramo final del partido fue un vaivén de emociones. Pasto creyó tener el triunfo en sus manos cuando David Camacho, al minuto 90, anotó el 2-1 con un disparo preciso. Parecía el golpe final. Sin embargo, Nacional, incluso con diez hombres, no se rindió.
En tiempo de reposición, cuando el reloj ya agonizaba, el portero del Pasto cometió una falta dentro del área que el VAR revisó y confirmó como penal. Jorman Campuzano tomó el balón, respiró profundo y con temple definió “a lo panenka”, picando el balón con sutileza y engañando al arquero. Gol, empate y desahogo. Nacional rescataba un punto heroico.
El 2-2 final dejó sensaciones divididas. Por un lado, la frustración de no poder sellar la clasificación anticipada; por otro, la satisfacción de mantener la racha invicta y el espíritu competitivo que Arias ha conseguido imprimirle al grupo. El equipo suma 28 puntos y necesita apenas dos más para asegurar su lugar entre los ocho mejores, pero el reto que viene no será sencillo: el clásico paisa ante Independiente Medellín, el próximo domingo a las 5:15 p.m. en el Atanasio Girardot.
Más allá del resultado, Nacional mostró carácter. Resistió en la altura, con un hombre menos y ante un rival que nunca dejó de insistir. Diego Arias volvió a dirigir con serenidad desde la línea, confiando en un grupo que, aunque todavía comete errores, ha recuperado su identidad y su garra.
La historia del partido no fue perfecta, pero sí honesta: un equipo que no se rinde, que aprende a sufrir y que sigue creciendo. En Pasto, Nacional no ganó, pero dejó claro que su espíritu competitivo sigue intacto.
Reviva aquí el minuto a minuto de este partido: