Hace 30 años La Hacienda provee de materiales a Caucasia
De niño Juan Diego Calle Sierra vendía las herramientas de su padre. Hoy gerencia su propia ferretería en Caucasia.
Cuando Juan Diego Calle Sierra tenía 8 años, veía a su padre calentar metal, martillarlo y convertirlo en herramientas que vendía en una pequeña tienda al lado de su taller. Él lo acompañaba todos los domingos a la plaza del pueblo a comercializar las herramientas en un toldo. Esa ferretería de su padre quedó en su ADN.
Cuando cumplió 20 años, migró a Medellín en busca de oportunidades y, entre esa búsqueda por un negocio rentable, encontró el oro. En 1987 llegó a Caucasia y por siete años se dedicó a comprarlo. Allí, entre sus nuevas amistades, conoció a la familia de José Valencia Osorio, quienes tenían la Ferretería La Hacienda en la emblemática carrera 1, al borde del río Cauca, un local lleno de historia. Inicialmente fue fundada con el nombre El Colono por Gabriel Harry Hinestroza y, a pesar de haber sufrido un incendio de pérdida total, fue reconstruida y vendida a la familia Valencia Osorio.
Por problemas administrativos, la familia Valencia Osorio tuvo que vender y Juan Diego, a quien ya le gustaba el negocio y llevaba el recuerdo de vender las herramientas que hacía su padre, la compró en 1994. Con un trabajo muy fuerte logró consolidarlo, consiguió créditos y poco a poco lo modernizó. Hace unos 15 años, el local fue totalmente remodelado, dándole la apariencia organizada y bien surtida que exhibe hoy.
En sus 30 años al frente de la Ferretería La Hacienda, ha demostrado una gran capacidad de resiliencia frente a los retos que ha traído. Superó la fuerte inundación del río Cauca en 2010, que cubrió el centro de Caucasia, resistió los riesgos de crecientes y, pese a sufrir atentados violentos y verse obligado a cerrar, retomó con un fuerte compromiso con la región.
La ferretería ha sido un proveedor clave en proyectos de gran envergadura en el territorio. Participó en la construcción de oleoductos que atraviesan Caucasia y en proyectos de inversión y cooperación internacional, como los liderados por USAID.
Actualmente, la ferretería emplea a nueve personas de forma directa, además de personal de contaduría y publicidad. El apoyo de la Cámara de Comercio de Medellín para Antioquia ha sido muy valioso, no solo a través de importantes capacitaciones para el personal, sino también un como referente y plataforma de conexión para vincular a la ferretería con estos grandes proyectos de desarrollo.
Para Juan Diego, ser el gerente de La Hacienda y mantenerla como una empresa tan representativa en la zona es un motivo de gran orgullo, una forma de honrar el espíritu emprendedor de su padre y de reafirmar su creencia en el potencial comercial del Bajo Cauca, región a la que le tiene un profundo amor y agradecimiento.