A “Calidoso” lo mataron por un parlante

La muerte de Marco Tulio Sevillano, el habitante de calle que murió en la madrugada del 2 de mayo luego de un ataque con gasolina por un compañero que le prendió fuego, se dio, al parecer, por un mal entendido con un parlante.

John James Vidal, más conocido como "Piraña", confesó el jueves en una audiencia privada ante un Juez de Garantías, que él fue el autor del homicidio y lo hizo porque le prestó a "Calidoso", como era conocido Sevillano, un parlante que jamás le devolvió.

"Piraña" fue capturado en la tarde del pasado jueves en Bogotá por la Policía Nacional, y posteriormente fue llevado a una audiencia de legalización de captura, donde aceptó haber cometido el delito.

De acuerdo con la investigación adelantada, el primero de mayo "Piraña" y "Calidoso" tuvieron una fuerte discusión por el parlante, donde el agresor lo acusó de haberle robado el artículo. "Horas después se dirigió a una bomba y compró una gasolina y se la arrojó a "Calidoso" y a su mascota, y les tiró un fósforo", informaron fuentes judiciales.

En la audiencia, "Piraña" sostuvo que le roció gasolina a Sevillano porque este era muy hábil con el cuchillo. Tras su relato, pidió protección al juez.

Luego del informe de la investigación hecha por el fiscal, el Juez 27 de Control de Garantías determinó enviar a la cárcel de La Picota a Vidal, quien aceptó los cargos por homicidio agravado, y podría pagar una pena entre 35 y 50 años de prisión. Mientras se adelantaba la diligencia contra "Piraña", Marco Tulio Sevillano era sepultado en el Cementerio Central, bóveda 627.

Estudiantes de la Universidad Javeriana, que reconocían a "Calidoso" como una persona bondadosa, le hicieron una despedida simbólica al habitante de calle que acompañaba a las estudiantes hasta el Transmilenio, luego de terminar las clases nocturnas.