A la protesta le faltó combustible
El Día del no tanqueo mostró diferentes caras en las estaciones de servicio de la ciudad. Algunas se movieron igual, en otras el personal aprovechó el tiempo hasta para limpiar. Aquí un panorama.
Una gran paradoja cree Édgar Chaverra que fue lo que vivió ayer: justo en la jornada del no tanqueo y, aunque él hubiera querido sumarse, le cayó una platica y pudo llenar su tanque al tope; lo que pocas veces le ocurre.
"Nos afecta mucho el precio tan alto de la gasolina, pero si no tanqueamos, ¿qué hacemos, si esta es la comida para nosotros?", dijo este conductor de taxi que, generalmente, echa 20 mil pesos diarios para 12 horas de turno.
Él fue uno de los clientes que se acercó a la Estación Colibrí, cerca de la 33, en donde vivieron una mañana "floja", más calmada de lo usual, debido a la convocatoria que se extendió por las redes sociales para el llamado Día del no tanqueo, que se estableció, en el ámbito nacional, para rechazar el alto costo de la gasolina.
El administrador de esa estación, David Parra , reconoció que con respecto a la mañana del lunes anterior, ayer notaron una reducción del 15 por ciento en las ventas.
En Esso Industriales, Gabriel Villada se movía con afán en su isla. Según él, el día era agitado como cualquier otro. "Como país somos poco solidarios para estas cosas. La gente se queja por el precio, pero como es artículo de primera necesidad es difícil que estas campañas peguen".
Pero, a media mañana, varias estaciones de la ciudad se observaban con menos clientes, los que llegaban, sobre todo, eran conductores de servicio público; los mensajes por las redes se incrementaron y las fotos de los perfiles se reemplazaron por una señal de no tanquear.
Y, aunque el apoyo de los cibernautas fue generalizado, muchos de ellos aseguraron que la manifestación no sería tan efectiva, pues "los que no tanquean hoy necesariamente tendrán que hacerlo mañana".
Incluso, se comentó que el domingo, al final de la tarde, varios se apresuraron a tanquear para evitar ir ayer.
Hasta día de limpieza
En Zamora, por la autopista Medellín-Bogotá, la estación Mobil Los Ángeles, vio reducidas sus ventas en un 30 por ciento, comparado con el lunes pasado. Esperan que hoy sea el desquite, al pasar la jornada de protesta. Con el trapo en la mano, Miguel Echeverry esperaba por usuarios, pero de las seis islas de tanqueo, solo había tres con gente. "Esto está muy solo", se quejó.
Apenas un 1,2 por ciento bajaron las ventas en la Estación Zeuss Ferrocarril, por la 33. Es decir, solo 40 galones menos que el lunes pasado, informaron sus directivas.
"Creo que la conciencia la debe tener es el Gobierno Nacional. Que haga un alto y piense en el porqué de la protesta y sea consciente del alto precio", comentó Carlos Toro , usuario de la Zeuss.
Con manguera y jabón, en Itagüí, en la estación Los Naranjos, los empleados se dedicaron a la limpieza. Una de las islas, en la que en el mismo lapso de tiempo hacen unas diez "tiradas", solo contabilizaron cuatro. Entre 6 y 8 de la mañana, afirmó Esmeralda Zapata , sí notaron buen movimiento, pero después bajó, por momentos, hasta en un 70 por ciento, por eso sacaron los implementos de aseo.
En el país varias ciudades se sumaron, aunque la fuerza parece haberse sentido más en las redes sociales. Juan Fernando Prieto , director ejecutivo de Fendipetróleo Antioquia, agregó que en la mañana de ayer hicieron un barrido por unas 27 estaciones, de las 120 con las que cuenta el área metropolitana, y según él, el balance preliminar fue de "relativa normalidad. Uno o dos de los encuestados nos dijeron de la baja clientela".
Lo que sí se escuchó, tanto entre quienes se sumaron al Día del no tanqueo y los que no, es que no hay bolsillo que aguante una gasolina tan cara, que les hace recorrerse la ciudad en busca dos o cinco pesos menos en el galón.